"Sería interesante pensar en un mejor plan de desarrollar energía renovable que no afecte a las turberas en Chiloé"
La doctora en Geografía visitó el Archipiélago para conocer en terreno la instalación de la industria eólica y sus efectos sobre el agua y las comunidades.
Continúa la preocupación por proyectos de energía eléctrica en Chiloé y su eventual impacto sobre ecosistemas acuíferos y comunidades locales, indígenas. El cuidado de la biodiversidad en la provincia y el país despierta el interés de numerosos científicos del mundo.
En ese marco, la doctora en Geografía, investigadora de la Universidad Darmouth College, en el noreste de los Estados Unidos, afiliada a Andes Lab Sur de la Universidad Austral de Chile, Sarah Kelly, visitó el Archipiélago para conocer en terreno la instalación de la industria eólica y sus efectos sobre el agua y las comunidades.
La profesional se ha especializado en la relación entre agua y energía y el vínculo que tienen las comunidades con el agua, desarrolló su doctorado colaborando con la alianza de comunidades del territorio denominado Puelwillimapu, ubicadas en los Lagos Maihue y Ranco, en la Región de Los Ríos. A partir de ahí adquirió experiencia relacionada a esta materia.
-¿Cuáles son sus líneas de investigación?
-Estudio cómo se desarrolla la energía y cuáles son los conflictos sobre ella, pero también como son las relaciones que tienen las comunidades mapuche huilliche y cuáles son sus preocupaciones, cómo se pueden hacer estudios participativos para estudiar las amenazas sobre el agua y las razones que tienen las comunidades para protegerla y ver cómo se puede traducir la información y/o conocimiento de las comunidades hacia instancias legales e institucionales.
-¿Cuáles son los principales hallazgos que ha encontrado en la relación entre comunidades y empresas?
-Es muy importante reconocer que en cada país hay distintas leyes las interacciones entre comunidades y energía, y con base a la experiencia observada podría decir que en Chile existen más conflictos socioambientales y eso tiene mucho que ver con la Constitución heredada de la dictadura. La situación de las comunidades de los pueblos originarios tiene que ver con una falta de justicia histórica, porque cuando se desarrollan proyectos sobre tierras que perdieron, históricamente existen conflictos que tienen cientos de años.
He visto en Chile cómo funciona el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) y cómo definen áreas de influencia para cualquier proyecto, creo que falta una justicia epistémica: el hecho de que una consultora esté a cargo de realizar estos estudios y no el Estado hace que estos estudios sean a favor de las empresas y no de las comunidades. En consecuencia, la comunidad afectada (mapuche o no) debe trabajar el doble o triple para que su conocimiento sea reconocido y se enmiende el error de cómo la empresa definió el área de influencia sin considerar afectaciones, obligándolos a buscar apoyos jurídicos en plazos muy acotados para defender su derecho de ser consultados y participar en estos proyectos.
Otro problema grande que pasa en Chile es que existe una falta de planificación en áreas rurales y muchas veces la forma como funcionan los estudios de impacto ambiental (EIA). Es que las empresas deciden muchas cosas en torno a los proyectos; antes de dialogar con las comunidades o la gente local, deciden dónde va a estar ubicado el proyecto, el tamaño y muchas cosas antes de llegar a conversar con la gente local que tienen un conocimiento profundo sobre su territorio.
Desde esta perspectiva, -pensando en los derechos de los pueblos originarios- en Chile no existe la posibilidad de que una comunidad puede tener arbitrio sobre los proyectos: aunque participan de las consultas indígenas, no pueden decir que no a un proyecto en su territorio. En otros países este tema está muy debatido, puesto que realmente la idea de Convenio 169 de la OIT (Organización Internacional del Trabajo) es que las comunidades puedan decidir proyectos en su territorio, decidir cómo se llevan a cabo las decisiones sobre su territorio y eso no ocurre en Chile; aquí las consultas indígenas son procesos hechos para que las empresas puedan cumplir con exigencias legales y continuar sus proyectos.
"ecosistema único"
-¿Qué fue posible constatar durante esta visita a Chiloé?
-El proyecto del parque eólico San Pedro me llamó la atención, porque es el primer proyecto que yo conozco que afecta las aguas. Los estudios globales sobre la energía renovable señalan que las eólicas son uno de los tipos de proyecto que no afecta las aguas, por lo tanto, el hecho de que la ciudadanía ya cuente con información sobre la afectación que producen las eólicas instaladas en la cordillera de Piwchen es notable. Eso me llamó la atención y fue uno de los motivos de visitar la provincia.
Otras cosas que me llamaron la atención es que las turberas son un ecosistema único y que existen especies endémicas en Chiloé. Acá no hay cordilleras con nieve, las turberas son una fuente de agua muy importante, pues actúan como una esponja que retiene el agua en Chiloé para la gente en otras épocas del año, muy similar a como funciona en Nueva Zelanda.
Me llama la atención de que ahora existen muchos estudios científicos tratando de entender mejor cómo y cuánta agua guardan las turberas. Me parece prudente que se entienda mejor el rol hídrico que tienen las turberas, porque el agua es vital y dada la problemática de escasez hídrica que existe aquí, se debe ver bien cuál es la mejor forma de proteger estas fuentes de agua antes de seguir haciendo más daño.
A nivel internacional existen movimientos de protección de turberas y si estamos hablando de cambio climático, las turberas son fuentes de carbono que llevo miles de años en formarse; entonces, es ilógico sacar una fuente de carbón antiguo para instalar una energía renovable que supuestamente nos va a ayudar con el cambio climático. Por tanto, sería interesante pensar en un mejor plan de desarrollar energía renovable que no afecte a las turberas como la gestión integral de cuencas y planificación integral para el cambio climático, porque no se necesita dañar las turberas para generar energía renovable. Si se quiere energía eólica se podría pensar a más pequeña escala, en otros lugares.