Analizan cómo fue la respuesta ante el temporal y megaapagón
Voces consultadas reconocen vulnerabilidad de la infraestructura local ante eventos extremos y llaman a incentivar campañas de prevención y a una mejor coordinación entre Gobierno, municipios y empresas proveedoras de servicios.
Conforme a los antecedentes presentados y ya con la distancia de casi una semana para sopesar diversos elementos, diferentes organismos técnicos y la propia comunidad realizaron un balance respecto de la respuesta desplegada ante el evento meteorológico del pasado martes que dejó a la totalidad del Archipiélago sin el suministro eléctrico por más de 10 horas, además de complicaciones en los servicios de internet y telefonía tanto fija como celular.
Se trata de efectos que incluso se extendieron por jornadas en miles de hogares de la provincia y también de otras partes de la región. Previamente, el lunes 1 de abril, algunas corporaciones municipales, previendo el vendaval del día siguiente, ordenaron la suspensión de las clases en establecimientos públicos. Y no solamente se consideró los pronósticos de la Dirección Meteorológica de Chile, sino que también de algunas aplicaciones, las que con los años han avanzado en precisión.
Municipios, unidades de emergencia e institucionalidad gubernamental, entre otros, abordaron las afectaciones que se registraron durante dicha jornada, con ráfagas que superaron los 120 kilómetros por hora, trayendo como consecuencia múltiples caídas de árboles, letreros y latas, además de voladura de techumbres y caños, destrucción de cercos y otros daños, junto a la suspensión de la conectividad en los canales de Chacao y Dalcahue, sin olvidar ciertas inundaciones debido a la lluvia en un martes en que claramente fue el viento el protagonista.
Más de 260 emergencias debieron enfrentar entonces los cuerpos bomberiles isleños, siendo la falta de energía eléctrica la mayor complicación para la labor de las distintas instituciones, además de la ausencia, débil señal o intermitencia de la telefonía e internet.
Desde los municipios se describió el trabajo desarrollado en pos de mitigar el impacto de este temporal. En Ancud, Alexis Latorre, jefe de la Secretaría Comunal de Planificación (Secplan), contó que "era una alerta que ya había sido recibida por parte de Senapred (Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres), la municipalidad ya había coordinado situaciones preventivas. El diagnóstico nos presentó una situación que afortunadamente fue disminuyendo. Mucha voladura de techo principalmente en el área urbana; después tuvimos en el informe que nos entrega Carabineros, en los reportes de ellos, en los recorridos con personal municipal, mucho corte de camino rural producto de desprendimiento de árboles y ramas".
La fuente repasó que "iniciándose el frente climático hubo voladuras de latas producto del incendio que tuvo la Cámara de Comercio (en el centro de la ciudad), rápidamente despachamos camiones que pudiesen apoyar en esa instancia. Bomberos tenía casi 30 llamados de voladuras de techo. A través del Departamento Social nosotros vamos a tratar de llegar al máximo de ellos (pobladores afectados), a los más graves en primera instancia".
"Se ha instruido a la directora subrogante de Dideco (Dirección de Desarrollo Comunitario) para realizar la entrega de kit de emergencias en caso de ser necesario", expuso, y ordenó la adquisición inmediata "de un set de respaldo para tener, por si hay situaciones que se tengan que analizar los próximos días".
Comunicarse por radio
En el sur de la provincia, Enrique Cárcamo, encargado de la Central Omega de Quellón u Oficina Comunal de Protección Civil, Emergencia y Seguridad Pública, también reparó en la caída de todas las redes de comunicaciones, lo que obligó a ejecutar otras acciones.
Describió: "Se atendieron ese día martes 29 emergencias en la comuna, que fueron siendo prácticamente coordinadas vía radial con Carabineros y con Bomberos principalmente, ya que como se cayó todo lo que era telefonía e internet, prácticamente toda la comunicación de nosotros fue vía radial. Hubo voladuras de techumbre, caídas de árboles en sectores urbanos, sectores rurales, tuvimos una emergencia de fuego, un vehículo, pero que no está dentro de la emergencia en sí por las condiciones climáticas, pero obviamente se suma".
Junto con ello, el funcionario mencionó que se dañó un semáforo en el cruce San Antonio, en la entrada de la ciudad, producto del viento. Junto a la Dirección de Tránsito y Transporte Público del consistorio se aisló el "tema eléctrico para que el equipo siga funcionando, posterior a la llegada de la luz".
"Al otro día, miércoles, se salió a terreno con móvil de la Oficina de Emergencia y se pudieron ver algunas otras situaciones: daños en techumbre en algunas viviendas, algunos invernaderos principalmente en el sector de Chaiguao, lo cual fue derivado directamente al Departamento Social para su visita y solución", compartió.
Finalmente, Cárcamo enfatizó en que "otra complicación que tuvimos en la noche, también del día martes, fue que en una de las torres de iluminación del Estadio Municipal se cortó uno de los pernos que la sujetan y que estaba con riesgo de caída hacia dos viviendas, y para lo cual tuvimos ahí que trabajar con Bomberos y con grúa particular, más personal municipal, para sacar la torre y evitar el riesgo de caída y de daño colindante".
Quien también debatió sobre el manejo de la emergencia y sus efectos colaterales en la población si no se toman acciones locales de prevención, fue Víctor Saldivia, quien es director docente de la carrera de Ingeniería Civil en Informática de la Universidad de Los Lagos Sede Chiloé. "Según mi percepción, este temporal que ocurrió el día martes obviamente nos hace una reflexión, desde el municipio, la comunidad, sobre la vulnerabilidad de la infraestructura frente a estos fenómenos, porque al final estos eventos que ocurren siempre acá en la Isla dejan sin suministro eléctrico a cientos de hogares, desconectados de internet", mencionó la misma fuente.
El académico añadió que "fueron más de 12 horas, incluso en algunos puntos hasta 30 horas (y días de apagón), entonces hay que abordar estas situaciones en el evento, en este caso durante el temporal con las brigadas de emergencia, pero yo siento que no se han fortalecido los mecanismos de prevención; entonces, es súper importante y crucial implementar estas medidas combinadas, obviamente que exista una mejor comunicación entre estas entidades, que parte desde el municipio, los proveedores de internet y el propio Gobierno".
En este contexto, el doncente hizo hincapié en que "la idea es tomar conciencia respecto a implementar por ejemplo programas de mantenimiento preventivo para redes de distribución eléctrica, redes de internet; concientizar a la comunidad también realizando campañas de educación pública. Importante esto: el actuar de la comunidad en estos eventos climáticos que son extremos".
senapred
Por parte del Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred), también se evaluó el actuar de las diferentes instituciones en el contexto de las intensas condiciones meteorológicas desfavorables en el territorio insular. En torno a aquello, Alejandro Vergés, encargado de dicha repartición en Los Lagos, detalló que "el principal problema se dio desde el punto de vista de la conectividad o el servicio de suministro eléctrico, que ya que ha ido a la baja en recuperación, no obstante en cuanto al tiempo se ha demorado la reposición".
El personero apuntó que "se comprometieron varios cortes en las mismas líneas de transmisión y eso ha ido complicando el trabajo de los equipos y particularmente además los sectores de complejo acceso".
De igual modo, Vergés insistió en que "la principal afectación se ha visto en los sectores rurales, no obstante esto también tiene repercusiones en las áreas urbanas. Esta es una combinación de factores: los vecinos deben generar sus propias condiciones de autocuidado (ramas, latas, techumbres, etcétera que están próximas a sus casas); también hay otras que no tienen que ver con ellos, tienen que ver con la mantención que las mismas compañías tanto de transmisión como de distribución realizan durante los diferentes períodos del año".
Un hecho no menor fueron las dificultades que enfrentó el Servicio de Atención Médica de Urgencia (SAMU), cuyos efectivos debieron laborar estrechamente con la policía uniformada y voluntarios bomberiles, a fin de estar alertas ante las eventualidades que iban aconteciendo y no disponer de telefonía celular y fija. Así lo expuso Fernando Gavilán, jefe de la entidad en la provincia.
"Afectó -dijo- particularmente al tema de las comunicaciones, aspecto muy relevante para nuestro trabajo. Trabajamos con el apoyo del resto de las unidades, específicamente con Bomberos y Carabineros, quienes nos informaban de las emergencias que se presentaban durante el período a nivel provincial. El subcentro de despacho de la provincia o el centro regulador es la unidad que recibe, optimiza el recurso, deriva o despacha los móviles según la necesidad de nuestros pacientes".
Finalmente por parte de la comunidad organizada, Carmen Antiñanco, dirigenta de la Federación de Uniones Comunales de Juntas de Vecinos Rurales de Chiloé (Feucoruch), planteó que "los equipos de emergencia funcionaron de manera correcta pero no se calculó el tenor de todo lo que iba a ocurrir, porque el corte de luz de tantas horas con daños tremendos en la economía familiar, viéndose todo lo que tiene un refrigerador, creo que en este momento aún hay lugares que no han podido restaurar el suministro, entonces quedamos con un daño tremendo y que creo que nadie lo calculó, creo que se vieron sobrepasados todos".
"Quedamos con un daño tremendo y que creo que nadie lo calculó, creo que se vieron sobrepasados todos".
Carmen Antiñanco,, dirigenta vecinal.
"Esta es una combinación de factores: los vecinos deben generar sus propias condiciones de autocuidado; también hay otras que no tienen que ver con ellos, tienen que ver con la mantención que las mismas compañías tanto de transmisión como de distribución realizan durante los diferentes períodos del año".
Alejandro Vergés,, director regional de Senapred.