Javiera Palta Olmos - Medios Regionales

Pese a que han pasado 42 años desde que Elvis Presley dejó este mundo, para muchos el 'Rey del Rock' sigue más que vivo no solo en sus canciones, sino que también entre los miles de artistas que le rinden tributo tratando de recrearlo en el escenario.

Sin embargo, entre todos los músicos, hay uno, Shawn Klush, que es reconocido por Elvis Presley Enterprises como el "primer artista definitivo en tributo a Elvis", y quien también tiene el respaldo de la familia Presley.

"Conozco a Priscilla y conocí un poco a Lisa", comenta Klush a este medio. "Ellas nos felicitaron por hacer lo que hacemos. Fue genial, porque ellas vinieron a vernos a uno de nuestros shows y nos dijeron que les gustó. Es muy difícil que a un miembro de la familia le guste que imiten a su familiar, pero a ellas sí les gustó, creo que fue uno de los momentos más resplandecientes de mi vida", asevera.

El amor de Klush por el mítico artista inició a temprana edad. Según él, todo empezó cuando tenía tres años. "Yo era muy, muy pequeño. Nunca me olvidaré cuando escuché esa música, creo que tenía tres años e incluso entonces me sorprendió, me voló la mente. Quedé en shock, asombrado: '¿Qué era ese sonido? ¿Quién era ese tipo?'. Creo que todos los músicos tienen un poco de Elvis en ellos, y yo empecé como ese niño que caminaba pretendiendo tener un micrófono, cantando y actuando", explica.

"Nunca soñé que pudiera estar donde estoy ahora, pero sucedió", reflexiona. "La verdad es que nunca entrené para hacer lo que hago hoy. Creo que amé tanto a Elvis que lo escuchaba constantemente, todo el tiempo. Y de repente, te das cuenta que ha pasado mucho tiempo y que llevas mucho tiempo en estos zapatos, cantando con el público, al final, creo que yo solo quería salir a cantar esta música con la gente y recordar a Elvis", dice.

Ahora Klush vuelve a Chile junto a Ryan Pelton y Moses Snow, también tributos a Presley, para presentar el espectáculo "The Ultimate Elvis Experience" a lo largo del país, donde se presentará este sábado en el Movistar Arena en Santiago, con entradas a la venta en el sistema PuntoTicket.

Asimismo, también tiene citas agendadas para el miércoles 10 de abril en Valdivia, el viernes 12 en Puerto Varas y el 13 en Temuco, estos con entradas a la venta en Ticketpro.

"He tenido la oportunidad de presentarme en Chile un par de veces antes, creo que han sido tres o cuatro veces", comenta el músico. "A mí me gusta tocar allá. En Chile, el público es inmenso y la energía… wow, tienen una gran energía, es lo más agradable", añade.

Al respecto, Klush no duda en recordar otro Movistar Arena que hizo años atrás. "Estaba cantando 'In the Ghetto' y recuerdo que todos se levantaron, prendieron luces, y empezaron a cantarla de nuevo en inglés, para mí. Fue increíble, recuerdo lo enorme que se vieron todos, me asombró mucho", rememora.

"Creo que a todos los públicos les gusta nuestro show, pero el fan chileno… ellos realmente lo disfrutan y uno nota que realmente pasan un muy buen momento, lo que lo hace genial, por eso nos gusta tanto cantar allá, porque Chile ama a Elvis", comparte.

"Han pasado más de 40 años desde la muerte de Elvis, y aun así, los fans vienen por montón, son miles, es una locura. Es increíble verlos. Y realmente nos hace sentir bien, nos alegra que todos ustedes amen a Elvis", cierra.

"Creo que a todos les gusta nuestro show, pero el fan chileno... ellos realmente pasan un buen momento".

Shawn Klush, doble de Elvis.

Como una promesa a emocionar a su público, el actor Mark Wahlberg vuelve a la gran pantalla con un especial compañero: un perro. Y es que el intérprete protagoniza "Arthur", cinta que acaba de llegar a los cines y cuenta la historia del atleta sueco Mikael Lindnord cuando este llegó a Ecuador en 2014 para participar en el Adventure Racing World Championship.

Lindnord participó en la carrera de aventura y resistencia como capitán de un equipo de atletas. Así, el grupo debía atravesar la selva amazónica y poner a prueba sus habilidades. El recorrido incluía caminar, andar en bicicleta y navegar en kayak a lo largo de más de 600 kilómetros.

Sin embargo, en medio de su recorrido, Lindnord se encontró con un perro callejero herido al que decidió darle un poco de su comida.

Ese simple acto hizo que el can decidiera no alejarse más del grupo. Los siguió sin importar las dificultades del camino y su propia salud, por lo que, mientras avanzaban los kilómetros, el amor crecía.

La historia quedó en un libro escrito por el propio deportista, quien entonces narra cómo al inicio de la carrera sólo le interesaba ganar.

"Mikael era uno de los tipos más egoístas del mundo en su búsqueda de ganar un campeonato mundial", dijo el actor a MovieWeb sobre la cinta, asegurando que, de todas formas, el atleta "hizo lo más desinteresado posible. Sacrificó la carrera, su sueño, para salvar a Arthur, a pesar de que él no era realmente un amante de los perros. Simplemente sucedió", comentó.