Atleta chilota Giselle Álvarez revela que fue abusada por su padrastro
La deportista que ha brillado en el plano nacional e internacional develó una cruda realidad a través de redes sociales. Especificó que esto debe ser un ejemplo "para las víctimas que han pasado por lo mismo y se atrevan a dar a conocer".
"He recibido muchos mensajes de amor, cariño y apoyo. Gente de todo ámbito y del mundo del atletismo, la gente que me conoce e incluso con quienes nunca he hablado. El respaldo ha sido gigante, de todo Chile, mi Chiloé y mi círculo más cercano".
Así la deportista Giselle Álvarez Rivera, de 31 años, describe lo que ha pasado tras divulgar en sus redes sociales un mensaje de 10 carillas, donde revela lo vivido entre sus 8 y 12 años, cuando estaba radicada en Castro, Chiloé.
La destacada atleta de la región, que participó en Santiago 2023 y que trabaja en Puerto Montt, en el IND (Instituto Nacional de Deportes), denunció que fue víctima de delitos sexuales por parte de su padrastro, quien es "un funcionario de la Armada", según detalla en la publicación replicada en Instagram y Facebook.
Giselle Álvarez, hoy de vacaciones, habló ayer con nuestro medio hermano El Llanquihue. Por estos días descansa en Río de Janeiro, Brasil. "Estoy sola disfrutando de un viaje para sentir que estoy libre de todo", dijo la ancuditana.
"CORRÍA POR ESCAPAR"
La fondista contó que comenzó a correr a los 10 años, porque así se sentía libre. "Yo corro, siempre me ven corriendo, me han conocido corriendo. Conocí lugares y gente por estar corriendo. Mi vida ha sido una constante carrera, de niña he corrido y no he parado. Me satisface hacerlo y quisiera nunca parar. Pero en algún momento de mi vida me detuve y fue para analizar si corría por conseguir una meta o si corría por escapar. Hay una gran diferencia en ambas cosas, aunque en la pista o para los que me observan no podrían notarlo", confesó.
Explicó que fue abusada y violada por su padrastro desde su preadolescencia: "Esta situación traumática se repitió hasta los 12 años, época en que participé de un taller extraprogramático en la escuela que se llamaba 'Quiero ser', en el cual se enseñaba educación sexual. Esas clases me permitieron darme cuenta de que había sido abusada sistemáticamente por mucho tiempo y, a la vez, me sirvió para adquirir o crear un mecanismo de defensa frente a esta situación".
La isleña de origen agregó que gracias al deporte pudo finalizar una carrera universitaria, convirtiéndose en profesional.
Develó que en este ambiente conoció a Erika Olivera, diputada y quien ostenta el reconocimiento de ser la maratonista más importante en la historia de Chile. "Ella es una de las más grandes referente del atletismo nacional, es un ejemplo para muchos y para mí también, sin duda. Tengo mucho que agradecerle, pero creo que el ejemplo más grande que recibí de ella fue cuando contó su historia como víctima de abuso. Ese hecho en particular, sumado a los relatos de las gimnastas de Estados Unidos, me ayudaron a tomar el valor de enfrentar mi propio drama", recalcó.
La atleta estudió un tiempo jurídica, por lo que sabía que una vez realizada la denuncia iba a prescribir.
"Uno se expone a cientos de prejuicios; pero tuve el valor de hacerlo y soportar los dos años que duró; insisto, habiendo una confesión y testigos del caso, de lo contrario esos dos largos años pudieron haber sido fácilmente el doble. Es muy desgastante, sobre todo tener que relatar una y mil veces lo que me sucedió, a pesar de tener ya sobre 30 años. ¿Alguien se imagina pasando por lo mismo a una niña de 10 o de 15 años? ¿Puede alguien a esa edad tener la fuerza de enfrentar una situación de estrés tan grande?", reparó.
Prescritos
La causa se mantuvo en indagación entre septiembre de 2021 y octubre de 2023.
"En mi caso; a raíz de la investigación realizada, las declaraciones de los testigos y del victimario, se determinó que los hechos eran constitutivos y tipificados como delitos de abuso sexual de menor y violación de menor. Sin embargo, por el tiempo transcurrido desde que sucedió todo, los delitos quedaron prescritos, por tanto, no hubo pena ni sanción, por lo que P. U. D. O. seguirá libre, trabajando en la Armada de Chile en la ciudad de Puerto Montt, constituyendo siempre un riesgo para cualquier menor de edad que tenga la desdicha de relacionarse con él", advirtió.
Al cierre de esta nota se intentó conocer si la persona sindicada como imputado por estos ilícitos sigue trabajando en la Armada, pero no hubo respuestas a las consultas.
La atleta de Puerto Montt reconoció que la publicación fue planificada, pero el primer objetivo era que pasara la etapa judicial.
"Estuve peor, destruida emocionalmente después de conocer que el caso había prescrito. Fue un momento bastante duro, y si empecé con un objetivo y después de lo judicial había pensado en hacer esto, quería estar más concentrada en los Panamericanos. Fue duro, porque la gente te preguntaba por la familia, tuve que sobrellevar todo ello, pero disfruté los Panamericanos con la gente que quería", manifestó.
Adjuntó que antes de hacer la denuncia llamó a la Armada "preguntando si trabajaba allí y le dije quién era, que iba a realizar una denuncia por lo que me hizo". Giselle espera que lo que le pasó a ella "sea un ejemplo para las víctimas que han pasado por lo mismo y se atrevan a dar a conocer y ojalá que no haya más víctimas del mismo personaje".
ES UN "ALIVIO"
La diputada de Demócratas del distrito 9 de la Región Metropolitana, Erika Olivera, manifestó que conoce a Giselle Álvarez hace muchos años y que trataron el tema.
"Valoro mucho lo que ella hace en su momento, es una mujer muy valiente, sabemos que no es fácil enfrentar ningún tipo de violencia, abuso sobre todo cuando se trata de violencia sexual hacia una niña, porque ellas tienen que desarrollar una vida y con ello no es fácil", compartió la parlamentaria.
Detalló que le agradeció a Giselle la confianza de haber conversado "y desde mi experiencia he tratado de orientarla en lo difícil del proceso y las cosas que pueden suceder, que es lo que uno ha evidenciado. Me alegra verla bien, verla libre, porque uno logra sacar esto adelante, y cuando es capaz de enfrentarlo o darlo a conocer".
Para la legisladora es un alivio entregar el testimonio sobre estas experiencias. "He tenido la oportunidad de escuchar relatos de muchas mujeres que han sufrido lo mismo, son situaciones dolorosas que marcan para siempre tu vida. Ella se ha convertido en una sobreviviente más de miles que tenemos en el mundo", sentenció.
Compañero y delegada
Mario Pardo, kinesiólogo de Puerto Montt, compañero de trabajo de Giselle Álvarez, comentó que lo ocurrido es una problemática que abarca lo humano y social: "Hay entereza y madurez. Es algo absolutamente sorprendente, lo vivió sola y no tuvo apoyo siendo tan niña. Tu familia no te apoyo, vivió todo esto sola y lo logró superar, y está allí el rol del deporte que le ayudó a salir de esta situación".
Para el profesional, la atleta fue valiente y fuerte al contar lo ocurrido y hacerlo público. "Está toda la admiración para resaltar la valentía que es muy difícil y traumática. Ello lo dijo y lo hizo público, porque se sintió defraudada por su familia y por el sistema judicial, ello porque producto de la norma prescribió y la persona culpable, confesa por este hecho, se quedó sin castigo", lamentó.
Giovanna Moreira, delegada presidencial regional, calificó que lo relatado por la deportistas es fuerte, considerando además que Giselle llevó la antorcha de los Panamericanos en la región.
"Es una experiencia de una mujer, bien terrible, pero ella comparte una experiencia que nos permite continuar generando las condiciones adecuadas para que las mujeres sientan que están protegidas al momento de denunciar, que no importa cuándo sea el momento que se pueda hablar dado lo doloroso de su experiencia. Por ello como Estado debemos construir políticas públicas y normativas para hacernos cargo de esta situación", expuso la representante del Presidente en la región.
"derecho al tiempo"
Macarena Gré, seremi de la Mujer y Equidad de Género, enunció que la violencia sexual es muy difícil de enfrentar y denunciar, precisamente por la vergüenza que muchas veces le produce a quienes la han vivido, pero también porque hay una falta de confianza hacia la institucionalidad.
"Aquí hemos visto un mensaje potente y valiente de una destacada deportista de nuestra región respecto de todo lo que, lamentablemente, le tocó vivir siendo una niña y que condenamos tajantemente", subrayó.
La secretaria regional ministerial precisó que los testimonios como los de la chilota permitieron abrir la discusión en el país respecto a que no prescriban los delitos sexuales contra niños, niñas y adolescentes, "ya que las víctimas pueden tardar décadas antes de estar en condiciones de contar lo que vivieron y es lo que se conoce como 'derecho al tiempo', lo que es un avance significativo".
"Fue duro porque la gente te preguntaba por la familia, tuve que sobrellevar todo ello, pero disfruté los Panamericanos".
Giselle Álvarez,, atleta chilota.
"Desde mi experiencia he tratado de orientarla en lo difícil del proceso y las cosas que pueden suceder que es lo que uno ha evidenciado".
Erika Olivera,, diputada y exdeportista.
10 carillas tiene la publicación revelada en las redes Facebook e Instagram.
31 años tiene la deportista que compite desde niña, cuando vivía en Chiloé.