Feria de aprendizaje exhibió el talento de 97 estudiantes castreños
ALTA-UACh cerró el semestre con esta actividad realizada en el Cecrea.
Enfocados en la tecnología, la expresión corporal, como también en la autorregulación, finalizó el segundo semestre la Escuela de Talentos ALTA-UACh en Castro. Un período que 97 estudiantes de establecimientos de educación pública coronaron con una feria de aprendizajes en el Centro de Creación Artística (Cecrea).
Con una decena de módulos y espacios de interacción, fueron los propios alumnos -de entre sexto básico a cuarto medio- los protagonistas de esta exposición que congregó no solo a sus familias, sino también a vecinos y otros niños y adolescentes, inquietos en conocer esta alternativa de formación que hace 12 años lleva adelante la Universidad Austral de Chile en la capital chilota.
Tras cumplir con clases presenciales y remotas, los educandos completaron este nuevo ciclo y mostraron sus resultados a la comunidad.
Así lo destacó Claudia Barría, coordinadora académica de este proyecto en Castro, detallando que "este semestre se desarrollaron cursos y talleres vinculados a la tecnología, relatos futuristas, creación teatral como nuevas líneas que quisieron incorporar los estudiantes, vinculadas a las habilidades corporales".
Mientras la primera parte del año se apuntó a la abogacía y las letras, en la segunda etapa del 2023 "se potenciaron los temas de expresión, sicología y las emociones, materias que nos piden constantemente los alumnos".
Todo este abanico de aprendizajes fue presentado en el Cecrea, "con 3 módulos de biología, circuitos eléctricos-radioafición y tecnología 3D; una puesta en escena de desarrollo personal, ejercicios de autorregulación; dos actividades experimentales de ciencias, intervenciones y los relatos futuristas", apuntó la profesional.
Aporte
Uno de los estudiantes que intervino activamente en la feria, explicando a los asistentes los alcances de los cursos fue Giovanni Márquez, quien participó del laboratorio de impresión de 3D. "Nos enseñaron como escanear objetos de la vida real para que a través de un programa llevarlo a la impresión en cualquier tamaño", remarcó.
Junto con destacar que utilizaron filamentos de plásticos -comprados y reciclados de botellas- para estas creaciones, el alumno de segundo medio del Liceo Galvarino Riveros relevó el aporte formativo integral que se entrega en ALTA-UACh.
"Se nos ofrecen alternativas de conocimientos diferentes a las que se entregan en el liceo, en este caso con la tecnología. Es un tema complicado, pero con el tiempo se va manejando. Me gustaría seguir aprendiendo de esto, puesto que es un tema que va creciendo a futuro y que podemos complementar con otras alternativas que nos dan en estas clases", reconoció.
Esta dinámica de diversidad formativa y dedicación fue relevada por uno de los académicos que forma parte del equipo docente. Se trata de Alejandro Claude, bioquímico de la UACh Sede Valdivia, quien comandó los talleres de radiodifusión y electrónica.
"Nos encontramos en una escuela de talentos; es decir, una tierra fértil que si no se trabaja no sirve. El talento no es nada sin disciplina, requiere de estudio y preparación. La formación es fundamental, por eso les entregamos herramientas diversas e integrales para que con disciplina se obtengan frutos y ahí el talento se aprovecha", explicó el educador.