Operario queda preso por femicidio en Quellón: piden el máximo peso de la ley
Sujeto podría ser reformalizado por un delito más gravoso, indicó la fiscal del caso.
Dejando abierta la opción de reformalizar a futuro por un delito aún más gravoso, durante la jornada de ayer el Ministerio Público encausó la indagatoria por femicidio no íntimo contra el confeso autor del asesinato de una joven en Quellón, cuyo cadáver fue arrojado a un costado de una multicancha. El imputado quedó privado de libertad.
En los momentos en que cerca de medio centenar de personas se manifestaba a las afueras del Juzgado Mixto local exigiendo justicia por este caso, la fiscal Karyn Alegría exponía en la sala los contundentes y macabros antecedentes que vinculan al encartado de 26 años, en el crimen perpetrado la noche del martes, al interior de una casa de la población Los Pioneros.
Tras dos días de ampliación de la detención y ya con las conclusiones preliminares de la autopsia practicada a la víctima de 35 años en el Servicio Médico Legal (SML) de Castro, la cual se efectuó bajo protocolos especiales por violencia de género, la persecutora presentó los medios probatorios para acreditar la existencia del tipo penal, la participación del quellonino y la necesidad de cautela.
Explicando la dinámica de los hechos, la abogada detalló que el operario pesquero contactó a la afectada de origen colombiano para un servicio sexual y, una vez en el domicilio, "sin mediar provocación y con ánimo de darle muerte, le propina golpes en diversas partes del cuerpo".
Lesiones
Según la necropsia, una veintena de lesiones en el rostro, cuerpo y extremidades presentaba la mujer. Añadió la jurista que "después de estos golpes, (el chilote) la estrangula primero con sus manos y luego con un cable de un alisador de pelo", causando al menos 4 equimosis cervicales. La causa del deceso fue asfixia por estrangulación.
A la evidencia tanatológica, la fiscal sumó el parte de Carabineros local, que dio cuenta del testimonio de la trabajadora que halló el cuerpo al borde de una muticancha de calle Josefa Díaz Vivar, como también el informe de la Agrupación de Homicidios de Chiloé que incluyó la declaración de dos testigos claves y la del propio imputado admitiendo su autoría, para acreditar la calificación jurídica e intervención del sujeto.
De esta forma, Alegría formalizó una investigación por femicidio por razones de género, como consecuencia de que la víctima ejerza o haya ejercido la prostitución u otra ocupación u oficio de carácter sexual. Además, invocó la cautelar más gravosa, en virtud de la gravedad y naturaleza del tipo penal, pero especialmente por la forma de comisión.
"Hay que considerar que el imputado con ánimo femicida se aseguró que la víctima muriera. La golpeó en todas partes y luego teniéndola sometida en el piso, la ahorcó con sus manos y con un cable le dio 3 vueltas al cuello para estrangularla", apuntó la fuente.
Insistiendo que el hombre por el servicio sexual tiene acceso a la ofendida, la representante del Ministerio Público dejó abiertas otras aristas penales que podrían intensificar los cargos.
La profesional advirtió que la joven presentó lesiones sexológicas que deben ser exploradas, añadiendo que existe evidencia que el operario no habría tenido dinero para cancelar la prestación sexual. Por ello, no se descarta que se pueda sumar alguna agresión sexual con este desenlace fatal, o bien, otra figura agravada. "Se avizora una reformalización", consignó.
Por su parte, el defensor Darwin Loreto se opuso a la prisión preventiva remarcando que ante los medios probatorios a la vista, no se configuraría un femicidio. Junto con desestimar los requisitos de género, precisó que los hechos se enfocarían en un homicidio.
Bajo dicha figura, el abogado expuso que "las penas son menos gravosas", sumando el concurso de atenuantes como "la colaboración sustancial que prestó mi representado, al no fugarse, entregando una declaración detallada y renunciando a su derecho de guardar silencio y ser asesorado por un abogado". Por ello, solicitó el arresto domiciliario total.
Sin embargo, la magistrada Claudia Villa sostuvo que existen antecedentes para sustentar la participación del encartado como la figura penal formalizada, manifestando que "existen parámetros para establecer que su libertad es peligrosa para la seguridad de la sociedad en Quellón".
Incluso, la sentenciadora coincidió con el ente persecutor, señalando que el sujeto habría actuado "con desprecio a la vida humana", recalcando que hasta se puede presumir la concurrencia de la alevosía. Por todo ello, decretó la prisión preventiva que cumple el isleño en la cárcel de Castro.
Respaldo
La precautoria dictada fue relevada por quienes se manifestaron fuera del tribunal, como los integrantes de la Red de Migrantes de Quellón. Su abogada, Carolina Valencia, valoró el despliegue fiscal y apuntó a perseguir la pena máxima.
"Nos reunimos junto a grupos feministas de la comuna para visibilizar este caso y buscar que el autor del crimen no salga de la cárcel", expresó la profesional.
Esta postura fue compartida por la concejala quellonina Tamara Martínez (PC), quien también se movilizó, puntualizando que "debemos dejar en claro que acá la noticia no es que la víctima haya sido una trabajadora sexual, sino que era una mujer que mataron de forma horrenda y la botaron en la calle".
Agregó la fuente que se debe apuntar a una pena ejemplificadora, "donde se tome en consideración la perspectiva de género", resaltando que prestarán todo el apoyo a la familia de la víctima.
"Mañana (hoy) a las 17 horas haremos una marcha y velatón en apoyo a la víctima, que parte en Plaza Los Caciques".
Carolina Valencia, vocera de la Red de Migrantes de Quellón.
1:44 del martes: una cámara capta al joven en la acción de dejar el cuerpo en la vía pública.
180 días se dictaron para realizar las pericias formalizadas por este bullado caso.