Ataque de jauría en Quellón deja 30 corderos muertos y pérdidas por unos $4 millones
En el sector Agua Fresca se produjo esta embestida contra un agricultor que perdió un tercio de su plantel ovino. Invoca mayor apoyo de la autoridad.
Pérdidas superiores a los 4 millones de pesos sufrió en las últimas horas un agricultor del sector Agua Fresca de Quellón, luego de un nuevo ataque de perros asilvestrados en su predio. Los canes mataron 30 corderos, dejando otros 4 heridos de seriedad y dos ovejas con lesiones menores. Un tercio de su plantel ovino desapareció en pocos minutos.
Rubén Díaz relató que tal como había sucedido a fines de marzo pasado, una jauría entró en las últimas horas a su predio y se ensañó con los animales. La embestida más reciente ha sido la de mayor impacto, reafirmando el desamparo de los campesinos ante esta creciente problemática.
"Yo trabajo en el transporte escolar y tras regresar de un recurrido, después de haber visto previamente a mis animales que estaban bien, un vecino me llama diciendo que estaban matando a los corderos. En camioneta subo a la pampa y veo como mi gran pirineo que tengo para el cuidado del lugar estaba peleando con un perro y otros tres permanecían atacando a los ovinos", describió la fuente.
Tras espantar al grupo de canes furiosos y no alcanzar a registrar de buena forma a los invasores que escaparon por un bosque, el poblador de 52 años dimensionó la magnitud de la matanza. "Los daños los avalué en unos 3 millones 900 mil pesos, pero va a ser más, puesto que los corderos heridos están en mal estado", aclaró, sumando que anteriormente el mayor ataque de las jaurías fue uno en que perdió 22 animales.
La víctima notificó lo sucedido ante Carabineros de la Sexta Comisaría local, que tomó la denuncia de rigor para iniciar el procedimiento penal respectivo por daños.
Así lo confirmó el mayor Iván Ulloa, titular de la unidad policial base, añadiendo que "personal del primer patrullaje tras un comunicado radial se trasladó hasta la localidad rural, donde se entrevistó con el afectado que tiene domicilio en el mismo predio, quien señaló que desconoce los dueños de los perros que causaron este hecho".
El oficial remarcó que los funcionarios acogieron el denuncio y recabaron antecedentes en el sitio del suceso, los cuales serán remitidos al Ministerio Público que citará al agricultor para potenciar la indagación por este caso.
Molestia
En Agua Fresca, como sostuvo Rubén Díaz, las arremetidas de canes son comunes. Incluso, advirtió que son pocos los que literalmente se atreven a criar animales. "En el sector somos unos 4 los que tenemos ovinos, el resto, más de 10 vecinos ya dejaron la actividad por las constantes pérdidas por este problema", acotó.
Bajo este contexto, el agricultor fue crítico, enfatizando que la autoridad no entrega respuestas para abordar de forma seria, integral y concreta esta realidad que se repite en todos los campos insulares.
"Sólo nos dicen que hay un seguro para cubrir las pérdidas. Yo tengo a mi plantel asegurado, pero todavía estoy esperando que me devuelvan el dinero por el anterior ataque de marzo. Fueron 5 los corderos que perdí y me reembolsarán 5,2 UF (unidades de fomento, unos 188 mil 177 pesos), lo que tampoco alcanza, puesto que cada cordero lo vendo por unos $130 mil", precisó el trabajador, cuestionando la tardanza y cobertura de estos agroseguros.
Igualmente, el afectado manifestó que muchas veces se le apunta al propio agricultor la falta de medidas para enfrentar esta problemática.
No obstante, la fuente aclaró que "yo he invertido un montón para evitar estas contingencias, no solo tengo dos perros gran pirineo, sino también he gastado más de $15 millones en cercos, los cuales tienen 5 hebras eléctricas y otras características para impedir la entrada o salida de animales, pero estos hechos siguen pasando".
El impacto a la economía familiar será muy duro como especificó la víctima. "Como trabajo en el transporte escolar, tras el término de clases tengo que depender de la venta de los ovinos por varios meses, pero ahora quedamos de brazos cruzados", comentó, recalcando que otro punto en discusión es la falta de apoyo legal que tiene la gente del campo.
"Por este problema de los perros que atacan a animales, la 'Ley Cholito' no nos protege, no da cuenta de recursos para abordar de forma eficaz la tenencia responsable y menos para amparar a los afectados. Las penas también deben ser de cárcel para que se tome conciencia de una vez por todas del daño que provocan estas matanzas", concluyó.
"No podemos tener de punto fijo a alguien vigilando que no entren los perros (...) Los campesinos se las deben arreglar solos".
Rubén Díaz, agricultor.