Profesional entrega pautas para una mejor vinculación entre padres e hijos
Directora del Programa de Interacción Padre-Hijo (PCIT) de la Fundación Ciudad del Niño, participó en webinar organizado por la Escuela Básica Dalcahue, instancia en que se abordó la situación de la relación entre padres, madres, cuidadores e hijos en contexto post pandemia y las consecuencias de la emergencia sanitaria.
Con el propósito de mejorar el bienestar y la salud socioemocional de los actores de la comunidad educativa y promover una sana convivencia en el entorno escolar y laboral, la Escuela Básica Dalcahue con el apoyo de la Fundación Ciudad del Niño realizó un webinar para los padres y apoderados, orientado a la relación de los progenitores con los hijos desde la perspectiva del contexto actual post pandemia y su importancia en el desarrollo emocional de los niños, niñas y adolescentes.
La actividad contó con la participación de la directora del Programa de Interacción Padre-Hijo (PCIT) de la Fundación Ciudad del Niño, Ana María Salinas, quien se refirió a la "Vinculación padre-hijo y su relevancia en el desarrollo emocional", charla que estuvo dirigida a todo el plantel educativo y a otros recintos educacionales de la comuna.
Las familias de la escuela pudieron conectarte de manera online a la charla y unos 50 apoderados se reunieron en el recinto para participar de la cita, oportunidad en la que pudieron interactuar con la profesional y resolver algunas interrogantes en torno a cómo fortalecer la relación con sus hijos.
Durante su intervención, la directora del PCIT explicó que "tenemos indicadores de salud mental de antes, durante y después de la pandemia que no son muy alentadores, respecto, por ejemplo, de niños y niñas con trastornos depresivos ansiosos. Todos vivimos las medidas de restricción e hicimos de todo para adaptarnos en nuestro contexto. Este año tuvimos el regreso a las actividades escolares con el covid-19 aún presente, y se habla de una 'nueva normalidad', pero ha costado adaptarnos y lidiar con otros factores que forman parte del contexto que estamos viviendo".
La profesional añadió que "ante esto surge la necesidad de implementar acciones preventivas para anticiparnos a situaciones que ponen en riesgo la integridad física y emocional de los niños, de poner en el centro de acción a las familias y dotar a los padres/adultos responsables de habilidades y herramientas que les permitan mejorar las relaciones con sus hijos".
FACTORES ESTRESORES
Según Ana María Salinas, aunque a todos nos ha afectado la pandemia, estas medidas han expuesto a los niños a una multiplicidad de factores estresores. Advirtió que el regreso a las actividades presenciales puede ser un reto emocional y tener un impacto significativo en los alumnos.
"Con este contexto es sumamente importante que los adultos que acompañan al niño puedan reconocer los síntomas de estrés. Cada niño reacciona de forma diferente ante las dificultades, pero algunos síntomas pueden ser la fatiga, cambios en la alimentación o sueño, opresión en el pecho, dificultad para respirar, dolor de estómago, temblores, dolores de cabeza, dolores genéricos, retraimiento, temores exacerbados, entre otros, y si duran un periodo determinado de tiempo el menor puede necesitar de un especialista", sostuvo.
En esta misma línea, la directora de la Escuela Básica, Yasna Soto, indicó que esta actividad junto a otros talleres preventivos que se realizaron en las últimas semanas buscan promover una buena salud socioemocional.
"Nuestros estudiantes pudieron participar de diversos talleres preventivos, en los que profesionales de Senda, PDI, Carabineros y del Cesfam de Dalcahue dictaron charlas sobre el ciberbullying y la prevención del consumo de alcohol y drogas. Además, los apoderados intervinieron en charlas en las que se abordó el tema de la parentalidad positiva y la importancia del vínculo de apego, todo enmarcado en reforzar el bienestar de toda nuestra comunidad educativa", puntualizó.
"Tenemos indicadores de salud mental de antes, durante y después de la pandemia que no son muy alentadores".
Ana María Salinas,, directora del PCIT de la Fundación Ciudad del Niño.