César Cárdenas Ruiz

Hablar de violencia escolar y bullying ha sido más recurrente que hablar de lenguaje o matemáticas en estas primeras semanas de año académico 2022, una situación que se ha suscitado en varios rincones de Chile. Y la provincia no es la excepción.

Por eso, no resulta casualidad que, según cifras de la Superintendencia de Educación, el 31% (393) de las 1.271 denuncias que habían ingresado a nivel nacional hasta el 22 de marzo de este año esté relacionado con maltrato a estudiantes.

De estas notificaciones formales, la mayoría se concentra en agresiones físicas y psicológicas entre alumnos (273), cifra que aumentó un 22% respecto del promedio del mismo periodo entre los años 2018 y 2019, los últimos antes de que llegaran la pandemia del nuevo coronavirus y los confinamientos como medidas de restricción sanitaria.

Al desglosar los estadísticos, se puede constatar que disminuyen las denuncias de agresiones sexuales, a la vez que aumentan las acusaciones por comportamiento de connotación sexual que no constituyen agresión física.

Chiloé también ha sido foco de esta tendencia, y si se consideran solo los hechos de más connotación ocurridos en los liceos Rayen Mapu de Quellón -donde un estudiante terminó con lesiones de arma blanca tras una riña registrada en patio del recicnto-, Insular de Achao o Politécnico de Castro, donde también se han producido incidentes al interior de sus comunidades escolares, el balance del primer mes de clases no ha sido bueno.

Lo anterior da cuenta de fenómenos que, para los expertos, no son aislados; existen explicaciones multifactoriales, que van desde la pandemia y respectivos encierros a causa de las extensas cuarentenas, hasta el contexto polarizado del país.

Agentes

Durante los dos años de confinamiento producto del covid-19 se produjo un debilitamiento de las relaciones sociales entre distintos actores escolares. Estos recientes e impactantes casos, confirman la importancia de promover para este regreso a clases presenciales, ciertas acciones y herramientas para la convivencia escolar.

¿Qué ha provocado esta ola de sucesos violentos apenas iniciado el año escolar?

"Sabemos que (los hechos de violencia) revisten distintos grados de responsabilidad y complejidad. Para nuestro entender esta es una de las consecuencias de dos años de distanciamiento y no presencialidad en las escuelas", señaló Marco Antonio Ávila, ministro de Educación.

En Ancud, por ejemplo, el Departamento de Salud municipal (Desam), en conjunto con el área de la Educación de la Corporación Municipal y la coordinación del Programa Adolescente, desarrolló recientemente una feria de salud en dependencias del Liceo Bicentenario.

Con el lema "Juntos prevengamos el bullying" se buscó fomentar entre el alumnado un ambiente saludable de convivencia en los establecimientos educacionales.

"Trabajamos todo lo que es la contingencia nacional en temas de convivencia escolar, bullying, ciber-bullying, acoso, todo lo que significa violencia dentro de los establecimientos", indicó la Marcela Oñate, directora del centro de enseñanza ancuditano.

Por su parte, Daniela Valencia, coordinadora de la Oficina de Protección de Derechos de la Infancia y Adolescencia (OPD) Zona Norte Ancud, instancia que constantemente trabaja estas materias, formuló que "nuestro programa principalmente aborda las temáticas, el resguardo respecto de las distintas vulneraciones de derechos que puedan estar sucediendo, ya sea a nivel de infancia y adolescentes".

Añadió la fuente que "tenemos una estrecha relación con los distintos establecimientos educacionales de la provincia y de la comuna, la idea es que cada establecimiento educacional pueda conocer los protocolos que tenemos nosotros".

Desde la Corporación Municipal para la Educación, la Salud y la Atención al Menor de Castro (Corpocas), frente a la situación que ocurre actualmente, se señaló que se están reforzando a los equipos psicosociales y de convivencia escolar, como también implementando un plan comunal, con la creación de una escuela para padres y madres. Junto con ello, el fortalecimiento de la Clínica Escolar y otra serie de medidas para prevenir el maltrato escolar.

énfasis

Referente a aquello, Francisco Mancilla, encargado comunal de convivencia escolar de la entidad municipal, hizo hincapié en las acciones más destacadas que se han implementado y seguirán aplicándose frente a dicha contingencia.

"Se realizan planes de gestión de convivencia escolar en cada establecimiento educacional, enfocados a reforzar las acciones en materia de prevención de la violencia y formación, en torno al buen trato, con énfasis en un trabajo complementario con los padres y apoderados, docentes y asistentes de la educación", explicó el sociólogo.

Igualmente, el profesional remarcó que se están reforzando "los protocolos de actuación y rol parental de padres y apoderados. También se trabaja la flexibilización de la jornada escolar con la introducción de actividades recreativas, deportivas y artísticas para que, junto con la recuperación de los aprendizajes, se recuperen el bienestar socioemocional y la sociabilidad de los integrantes de cada comunidad educativa".

Sumó el funcionario que habrá fortalecimiento de "la alianza familia-escuela para que los padres y apoderados se interioricen respecto de los reglamentos internos de los establecimientos educacionales y puedan complementar en el hogar las acciones formativas desarrolladas por las escuelas y liceos".

De igual modo, recalcó que "se hace necesaria la articulación entre los diferentes organismos públicos relacionados para concretar una intervención integral en las diferentes comunidades escolares y así, en conjunto, crear una cultura del buen trato y respeto hacia todos los integrantes de las comunidades educativas y de la sociedad en general".

Al extremo sur del Archipiélago, Quellón fue una de las comunas que más ruido hizo frente a este flagelo, debido a lo ocurrido en el Liceo Rayen Mapu. Una situación que no dejó indiferente a nadie y que encendió las alarmas en quienes comandan el sistema público de educación en la comuna puerto.

Claudio Lemarie, secretario general (s) de la Corporación de Educación, Salud y Atención al Menor hizo hincapié en la labor que por estos días se ejecuta.

"Los hechos que hemos tenido son situaciones puntuales; los niños que nosotros atendemos son aquellos que tienen un porcentaje alto en la comuna de necesidad. Hemos tenido casos aislados, sí. Los protocolos que nosotros hemos activado, principalmente son los protocolos de convivencia escolar en cada uno de los establecimientos", afirmó el contador auditor.

Añadió que "nos hemos reunido como sostenedor con los directores de cada uno de los establecimientos, donde hemos tenido alguna situación de estas, y hemos trabajado en conjunto para que sus equipos de convivencia escolar puedan actuar rápidamente, tanto en la contención, como en las víctimas o las personas que han tenido alguna situación de peleas, que puntualmente se podían haber dado o que se dieron en establecimientos".

Ayuda

Igualmente, el profesional adjuntó que "nosotros le prestamos la ayuda a ambas familias afectadas, hay que insistir que detrás de esto hay familias afectadas, y la idea es contenerlos, apoyarlos, nunca vamos a decir 'a estos niños hay que sacarlos', sino que vamos a tener que enfrentar el problema por la situación que estamos viviendo".

Concluyó el profesional coincidiendo en que "el hecho de volver de una pandemia, insertarse rápidamente a lo que fue esta obligatoriedad de volver a la presencialidad, afectó sin dudad a nuestros establecimientos".

"Los hechos que hemos tenido son situaciones puntuales".

Claudio Lemarie,, secretario general Corporación Municipal de Quellón.

"Se realizan planes de gestión de convivencia escolar en cada establecimiento, enfocados a reforzar acciones en materia de prevención de la violencia y formación".

Francisco Mancilla,

encargado de Convivencia Escolar de la Corpocas.