Buscan zanjar conflictos de acceso en 29 playas del país
En lo que va del verano, ya son cerca de 100 los reclamos que han llegado al Ministerio de Bienes Nacionales denunciando problemas para acceder a las playas del país, zonas que por ley deben estar liberadas para el uso público.
Las quejas planteadas en la época estival apuntan principalmente a accesos cerrados o el impedimento de ingreso por parte de un tercero, problemas que desde la cartera llaman a seguir denunciando para que las autoridades puedan abordar soluciones que devuelvan el libre tránsito en los espacios playeros.
"En nuestro país no hay playas privadas, todas son públicas y todos tenemos derecho a acceder a ellas", recalcó el ministro Julio Isamit.
Intervención en curso
Ante diferendos por los accesos, la cartera cuenta con diferentes herramientas para garantizar el uso público del espacio. Una de ellas es la fijación de líneas de playa, mecanismo que actualmente se está usando en 29 balnearios para zanjar conflictos de ocupación y construcciones de propietarios ribereños.
Isamit explica que este método se aplica cuando los títulos de dominio de los terrenos privados colindantes con ríos, lagos o el mar dicen que su límite son estos cuerpos de agua, lo que contraría la legislación que exige siempre la existencia de una franja de terreno público que se denomina playa, el que abarca desde la línea más baja hasta la más alta que el agua alcanza con su crecida natural.
Para determinar estos márgenes se utiliza la "fijación de línea de aguas máximas", que en caso de playas de mar lo realiza la Armada y en ríos y lagos corresponde al Gobierno vía Bienes Nacionales.