César Cárdenas Ruiz

Si bien, por ahora serán devueltos al sitio donde habitualmente desarrollan sus actividades, parte de los integrantes de la denominada feria social o popularmente conocida como "Feria de las Pulgas" mantienen cierta inseguridad a la hora de referirse a lo que será su futuro.

En este lugar se ejecutan actividades comunitarias, permitiendo que los vecinos puedan vender diversos productos de segunda mano que se encuentren en buen estado, o productos de elaboración propia, además de verduras y otros alimentos.

De público conocimiento es que en el lugar donde se desempeñan -un sitio eriazo ubicado a un costado del supermercado Unimarc, el cual es propiedad de la empresa Pasmar- será utilizado por el holding inmobiliario puertomontino para el desarrollo de un proyecto comercial, del que por ahora no existe mucha claridad.

Fue justamente en esta última semana cuando los comerciantes debieron abandonar dicho espacio para dar paso al ingreso de maquinaria que ejecutó algunos trabajos de estudio de suelo, con la finalidad de analizar esta variante que podría permitir en un futuro no muy lejano la construcción -aparentemente- de un centro comercial en la comuna norte de Chiloé.

Lo anterior trajo consigo que estos emprendedores ocupen la mencionada arteria, entre calle Dieciocho y Colo Colo, y así cuenten con la posibilidad de seguir trabajando. La determinación fue acordada entre las tres organizaciones establecidas en la feria y el municipio, para que hasta el viernes se ubicaran provisoriamente allí.

De forma extraoficial, se ha hablado de que la iniciativa empresarial podría comenzar a materializarse en un plazo de un año y medio a dos años. Esto si bien otorga una momentánea tranquilidad a los feriantes, genera a su vez una inevitable incertidumbre.

Incertidumbre

Así lo manifestó, por ejemplo, Magaly Martínez, dirigenta de las verduleras de la feria social, instancia que está compuesta por más de un centenar de personas, en su mayoría mujeres.

"No nos ha dicho nada el alcalde (Carlos Gómez), rumores hay de que nos van a mandar a los galpones del gimnasio (Fiscal), pero ahí no venderíamos nada nosotros. Entonces estamos un poco preocupados con eso", indicó la fuente.

Sumó la isleña que "no nos hemos podido reunir con él (jefe comunal) porque él tampoco da entrevistas. Tenemos un futuro totalmente incierto, hay mucha gente que vive del día a día. Llamamos a él (alcalde) a que dé la cara, que hable con nosotros los dirigentes, que diga si vamos a seguir ocupando el lugar o qué va a pasar".

Misma opinión tiene Érica Núñez, presidenta de la Agrupación Mirando al Futuro, quien también hizo hincapié en la inestabilidad que significa no tener claridad sobre el mañana.

"En este momento no podríamos decir que estamos seguras en el lugar que estamos porque no nos han dicho nada, no sabemos si nos va a echar o vamos a seguir ahí. Hasta este momento nos han dicho que seguimos ahí, pero nadie nos ha dicho lo contrario", explicó.

Agregó la ancuditana que "también hay inseguridad porque no sabemos qué va a pasar. No nos han dicho absolutamente nada, así que hasta que tengamos una reunión, nos citen y nos digan qué va a pasar, nosotros vamos a tener que ver qué va a suceder con toda la gente que en este momento está trabajando en ese recinto".

Igualmente, la líder social añadió que "nos reunimos con la señora Claudia Placencio (encargada de Seguridad Pública) y don Alexis Latorre (administrador municipal), y nos dieron todo el apoyo a la gente".

Estable

De igual modo, Angélica Veloz, integrante de la misma agrupación, también hizo eco de lo expresado por sus pares.

"Actualmente estamos fuera del terreno porque estaban haciendo estudios, lo cual significa que el día de mañana pueden construir algo, da a entender eso. Nosotros lo que pedimos y estamos esperando, es que un día podamos tener un lugar fijo donde estar".

En tal sentido fue enfática al señalar que "no estamos mal, pero si quisiéramos tener un lugar fijo donde guardar nuestras cosas porque todo eso significa cansancio, sin pensar que el día de mañana tengamos que salir, esa es la idea. Necesitamos que sea algo céntrico porque como todo buen chileno uno espera tener todo a mano".

Bajo este contexto, la trabajadora recalcó que "de mi parte, yo donde me dieran igual aceptaría, pero la idea es que tengamos un lugar fijo donde estar, que no nos vuelvan a sacar".

Desde la Municipalidad de Ancud, el administrador Alexis Latorre fue claro al desestimar que exista alguna otra finalidad respecto a la medida de sacar momentáneamente a los vendedores del lugar donde ejercen su actividad comercial, el cual está ubicado en calle Pedro Montt, en la parte céntrica de la ciudad.

"Les solicito a los vecinos que aquellas personas que hablan de que se les está desalojando o algo por el estilo, eso no es así. Aquí no hay que difundir información falsa. Tal como se lo hemos señalado a los dirigentes, es una situación transitoria por cuatro días y nosotros vamos a disponer este espacio para que ellos realicen sus ventas", afirmó.

Pasmar

Lo anterior fue corroborado por la propia empresa Pasmar. Juan Carlos Erices, gerente de administración y finanzas de la firma, aclaró que "en estos momentos, Pasmar está llevando a cabo un estudio del terreno, lo que constituye el paso previo para la presentación de un proyecto comercial".

Pasmar opera en la zona sur del país con una importante cadena de centros comerciales de la zona: Mall Paseo Costanera, Mall Paseo del Mar, Mall Paseo Paloma y Mall Paseo Rotonda, en la ciudad de Puerto Montt. Además del Mall Paseo Chiloé, en Castro, y Mall Paseo Puerto Varas, todos en la Región de Los Lagos.

"No nos ha dicho nada el alcalde, rumores hay de que nos van a mandar a los galpones del gimnasio (Fiscal)".

Magaly Martínez,, dirigenta.