Ignacio Silva - Medios Regionales

En junio del año pasado Charli D'Amelio, influencer estadounidense y la usuaria más popular de TikTok, publicó un video que se alejaba de sus usuales bailes y coreografías.

En el clip, en cambio, se veía la transformación de la celebridad de 17 años luego de someterse a una rinoplastía, en una compilación de videos cortos que funcionaban como un "antes y después".

No es un caso aislado: con sus cerca de 15 millones de likes, el TikTok de D'Amelio es el video más popular dentro de un trend que ya suma cientos de miles de videos en la red social. En los últimos meses, además, a esa tendencia se sumó otra similar con jóvenes mostrando los resultados de su bichectomía, procedimiento que extirpa las bolas de Bichat para adelgazar el rostro.

"Las redes sociales nos hacen pasar horas observando un mundo que muchas veces carece de realismo. Esto repercute también en esos estereotipos falsos e irreales del cuerpo que se ven en plataformas como Instagram y TikTok", explica Carolina Silva, psicóloga de PsicologiaChile.cl.

La especialista argumenta que la exposición a esos estereotipos genera que las personas "busquen ser aceptados socialmente a través de un cuerpo "modelo" que genera una falsa sensación de éxito". De ahí, dice, que cirugías como estas se hayan popularizado en el contexto de pandemia.

Para Nicolás Silva, máster en TI de la Universidad de Carnegie y director de Tecnología de Asimov Consultores, la tendencia tiene una explicación lógica.

"Tanto TikTok como cualquier otra red social utilizan algoritmos automatizados para promocionar los contenidos que te resultan más atractivos. Mediante análisis estadísticos y de acuerdo a tu comportamiento de navegación, estos algoritmos te van a mostrar lo que más se asemeje a los gustos de personas similares a ti", apuesta.

"De esta manera, contenidos como rinoplastías y cirugías se transforman en tendencia porque existen determinados grupos de usuarios que tienen una alta probabilidad de hacer clics a esos anuncios. Así estos contenidos finalmente se convierten en tendencia", apunta.

Riesgos

Pese a que puede parecer una realidad lejana, cifras de la Sociedad Chilena de Cirugía Plástica indican que el número de personas que se someten a intervenciones estéticas se ha triplicado.

Para Alison Ford, cirujana plástica de Clínica Las Condes, el análisis es similar. "En los dos periodos posteriores al peak de la pandemia se ha visto un aumento de la cirugía estética en general, y bastante en lo que es cirugía facial", revela.

Según la visión de la especialista, es la bichectomía el procedimiento que ha ganado mayor popularidad en el país durante este tiempo. Aunque advierte que "está sobreindicada porque hay una distorsión de lo que puede lograr".

"Puede ser pan para hoy, hambre para mañana, porque la bichectomía saca las bolas de Bichat, que es una bolita de grasa que está en el carretillo y cuando el paciente es joven puede que se note una diferencia, pero yo prefiero hacer liposucción de esa zona", comenta Ford. "Me parece que es más anatómica y efectiva porque además cuando uno envejece la cara va perdiendo volumen y a veces se ve muy fea la pérdida de volumen de la bola de Bichat".

Por otro lado, la especialista arguye que una alternativa a la rinoplastía puede ser la rinomodelación, procedimiento que modifica la nariz por medio de ácido hialurónico. "La rinoplastía es una solución definitiva a un problema de la nariz, ya sea estético o funcional. La rinomodelación a veces la buscan pacientes que no tienen una nariz que esté tan mal pero quieren realzar algún detalle como la definición de la punta, y también pacientes que no tienen interés en operarse y quieren lograr una mejoría estética", define.

En cuanto a los riesgos, la especialista comenta que la mayoría se asocia al conocimiento del especialista que realice el procedimiento. "El profesional tiene que conocer la anatomía de las zonas y cómo realizar los procedimientos. En el caso de la rinomodelación, la inyección del relleno puede tener riesgos no menores que van desde pérdida de piel a la ceguera", consigna.

"Los riesgos que puede tener la rinoplastía, como cualquier cirugía, es que tenga alguna complicación o que necesite algún retoque. En cuanto a la bichectomía, si uno no conoce bien la anatomía incluso podría llegar a lesionar alguna rama del nervio facial que da la movilidad a los músculos de la cara", adjunta.

-Como recomendación general, ¿qué se le podría aconsejar a una persona que está pensando someterse a una de estas intervenciones?

-La primera recomendación es consultar en un lugar que tenga algún reconocimiento, con un profesional reconocido de la especialidad, en este caso cirugía plástica. Uno tiene que asegurarse que los profesionales que lo atienden y las condiciones, las instalaciones en que se opera, cumplan con los parámetros establecidos para brindar seguridad al paciente. Además, tiene que pedirle al tratante que le hable del tratamiento, de las limitaciones y de las eventuales complicaciones que puede tener. Informarse y exigir que le informen bien.