Recuerdan los 309 años del levantamiento indígena de Quilquico
Comunidades williche valoran mantener viva la memoria.
309 años se conmemoraron ayer del llamado levantamiento originario mapuche williche de la Isla de Chiloé, ocurrido un 10 de febrero de 1712, fecha que para el Consejo de Kacikes Mapuche-Williche de Chiloé es importante de visibilizar.
Si bien, producto de la pandemia no se pudo concretar alguna actividad simbólica, sí para la organización es vital que este hecho histórico sea recordado. Enfatizan que fue una rebelión que implicó consecuencias en las comunidades indígenas y para la población chilota en general, tras la muerte de unas 600 personas, producto de las luchas en las que se enfrentaron williches y españoles.
El secretario general de la entidad, Manuel Rauque, explicó que la conmemoración del hito, la basan en documentos históricos.
"De siempre hemos estado preocupados de todo lo que tiene que ver con nuestra memoria, no en el sentido de volver atrás o cobrar venganza, sino conmemorar un hecho que marcó la vida de todo Chiloé, no sólo de las comunidades originarias, de la población mestiza", recalcó el educador.
Añadió la fuente que "generalmente nos apoyamos de textos escritos de categoría, académicos como Rodolfo Urbina que es muy riguroso. Para no hablar tanto del sentimiento, que es valioso, pero cuando se trata de rememorar públicamente, se necesita evidencia histórica".
Antecedentes
La rebelión williche de 1712 fue un alzamiento armado en contra de los encomenderos españoles. Comenzó a principios de febrero de 1712 y fue sofocada una semana más tarde por medio de combates y matanzas. Significó la muerte de varios cientos de williches y de unas decenas de españoles.
"El año antepasado se levantaron las banderas williches acá de Chiloé, con las mapuches también. Yo me imagino que, si esto hubiese sido hoy día, los medios hubiesen estado todos transmitiendo en directo, porque se destruyeron viviendas, hubo asesinatos, fue una desolación total", dijo Rauque.
De esta manera, la idea es que, a partir de la remembranza del hecho histórico, las futuras generaciones puedan valorarla en la dimensión que se merece.
"Como consejo hemos estado hace muchos años tratando de que la memoria no se pierda, tal vez para la cultura occidental, siempre dicen lo pasado pisado, pero para nosotros los pueblos originarios siempre estamos escuchando del pasado, el presente y el futuro. El pasado sirve para no cometer los mismos errores", observó.
Durante la rebelión, las comunidades cercanas a Castro convocaron a un Gran Palin en Quilquico (Castro) en enero de 1712. Por eso, en el futuro, cuando la fecha histórica tenga mayor visibilidad, se espera concretar alguna actividad simbólica en ese sector.
"Siempre hemos dicho de hacer algo en Quilquico, pero por razones de pandemia y tiempo no hemos podido. Pero esto no es que alguien se le ocurra y que hay que rememorarlo, sino que llegan momentos para desarrollarlo. El Tratado de Tantauco lo reivindicamos nosotros, también estaba olvidado. Lo reivindicó el anterior cacique (Carlos Orlando Lincomán), y ahora es más conocido", afirmó.
Ayer las comunidades realizaron una reunión online vía Meet, con el fin de conversar sobre esta fecha.