Natividad Espinoza R. - Medios Regionales
Aunque ayer fue el Día de la Sopaipilla, todo el invierno merece un buen homenaje que conlleve el deleite de esta comida.
Generalmente, esta fritura se acompaña de pebre, guacamole, mostaza o kétchup, aunque también se le pueden poner todos los ingredientes de un completo italiano, para crear el ya icónico "sopaipleto". Y cuando se las quiere dulces, en tanto, lo más típico es hacerlas pasadas con chancaca, ponerles manjar o espolvorearlas con azúcar flor.
No obstante, las alternativas para acompañar esta preparación típica chilena no tienen límites. Así lo cree el administrador gastronómico de Inacap, Alejandro Ramírez, quien invitó a experimentar con nuevos sabores para dar un toque diferente a estas delicias.
"Al tener un sabor suave, las sopaipillas quedan bien prácticamente con todo. Son muy versátiles", comentó. Y añadió que se puede experimentar con lo que se tenga a mano, sean frutas, verduras o hasta legumbres. ¿El implemento clave? "Con un procesador de alimentos o minipimer se hacen milagros", contó.