Con estricta reserva comenzó durante la jornada de ayer el juicio contra un obrero sindicado como el responsable de aberrantes ultrajes contra dos hijos, en los momentos en que permanecían en su hogar ubicado en la comuna de Quinchao. 20 años de cárcel piden en su contra por estos episodios de violencia sexual.

El sujeto de 53 años enfrenta cargos por violación infantil en carácter de reiterado, en perjuicio de su hija de apenas 11 años al momento de los hechos, registrados a fines del 2016 y junio del 2017. Además, está acusado del abuso sexual de su hijo -de entonces 15 años-, por un caso también registrado el 2017.

Ante la crudeza de los antecedentes, el fiscal de la causa, Luis Barría, pidió a la sala del Tribunal Oral en lo Penal de Castro, presidida por la magistrada Angélica Monsalve, que no se publicitara la audiencia, aduciendo "el resguardo de las víctimas" que aún sufren el impacto de la pesadilla vivida al interior de su vivienda.

La solicitud fue replicada por la querellante, Karen Gómez, abogada del Programa Reparación y Justicia y que representa a la menor, quien insistió en los alcances que ha tenido este caso y que han repercutido en la escolar.

El defensor particular Alexander Streinesberger, igual pidió la mantención de la reserva informativa, a lo cual accedió parcialmente la sentenciadora.

Penas

Bajo este contexto se desarrolla la sesión judicial que incluyó en la primera jornada los alegatos de los intervinientes. El persecutor, como especificó en su acusación, sostiene una pretensión punitiva de 20 años de presidio contra el encartado por el ilícito más gravoso y de 5 años por el abuso, invocando el concurso del agravante del parentesco.

Las mismas penas solicita la querellante, mientras que la defensa buscará la absolución de su representado dentro de un debate que estará marcado por el contexto de violencia intrafamiliar en este hogar isleño.

Es más, uno de los puntos que se analizará está centrado en un eventual ciclo intergeneracional de aceptación y normalización de conductas sexualmente abusivas hacia todos los miembros de la familia.

La audiencia continúa hoy con el resto de la exposición de la prueba. Los acusadores fijaron 65 medios para acreditar sus pretensiones, principalmente testigos y documentos, mientras que la defensa incluyó tres testigos más en favor del imputado que se encuentra privado de libertad en la unidad penal de Castro desde el 31 de enero de este año.

Pedro Bárcena González

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