Una capacitación sobre marea roja recibieron técnicos de enfermería en nivel superior (tens) de postas rurales, centros de salud familiar y representantes de la sociedad civil de la comuna de Castro.

Este taller permitió mostrar el trabajo que se ha estado realizando en Chiloé desde el gran fenómeno ocurrido el 2016 y que desde el verano de este año ha tenido un evento que en su mayor extensión afectó desde Quellón, por el sur, a Ancud, por el norte, y hasta la zona de Tranqui por los canales interiores y hasta Faro Corona en la costa oceánica.

En los aspectos considerados está una presentación del evento de floración algal nocivo (FAN) de marea roja 2018, con una revisión de la situación actual, así como el seguimiento epidemiológico, haciendo énfasis en cómo funciona el sistema de vigilancia y la normativa.

"Todavía tenemos áreas cerradas en el sur de Quellón y si bien estamos a la baja y el tema está más controlado, la presencia de marea roja aún está y, por lo tanto, no podemos bajar la guardia y esto se tiene que establecer como una forma de trabajar, desde el punto de vista de los profesionales de salud, como las precauciones que debe tomar la población en general y obviamente los pescadores, quienes necesitan aprender a trabajar con este fenómeno permanentemente", dijo la seremi de Salud, Scarlett Molt.

En la capacitación también se consideraron estrategias de promoción y participación ciudadana desde los determinantes sociales de salud y cómo se informa a la comunidad desde la comunicación de riesgo por el fenómeno.

"Somos la puerta de entrada, es acá donde llegan los pacientes. Tenemos que hacer prevención y mostrarle a la comunidad que es muy importante conocer la sintomatología para no llegar tarde a los centros asistenciales", justificó Jeannette Santana, jefa de Salud de la Corporación Municipal de Castro.