Acusan a médico por prácticas de connotación sexual
Peritos de la Brisexme están desarrollando la indagatoria tras dos denuncias de mujeres que acudieron a la consulta del especialista en Castro. El fiscal jefe de la jurisdicción confirmó que un tercer caso se reabrió por estos antecedentes.
En plenas diligencias se encuentra la Brigada Investigadora de Delitos Sexuales y Menores (Brisexme) por la denuncia de dos jóvenes contra un médico, a quien acusan de prácticas de connotación sexual al momento de ser examinadas en su consulta, ubicada en un centro médico de calle Ramírez de la capital chilota.
Las pericias fueron instruidas por el fiscal jefe de Castro, Enrique Canales, quien confirmó que a estos dos casos se suma un tercero correspondiente a una causa que había sido archivada el 2014, pero que con estos nuevos antecedentes relacionados a un modus operandi similar del especialista fue reabierta para ser indagada por la policía.
De acuerdo a lo manifestado por el persecutor la investigación está en curso tras una orden despachada por 30 días, la cual puede extenderse considerando los resultados que se obtengan de las pesquisas de los detectives.
"Hay denuncias con dos víctima y había una años atrás que no prosperó por falta de antecedentes para sostener una acusación, una causa que se desarchivó a propósito de estas dos denuncias", expuso el representante del Ministerio Público, aclarando que la policía especializada ahora concentra el trabajo, el cual había sido realizado con respecto al primer caso por parte de la Brigada de Investigación Criminal (Bicrim) de Castro.
Desjudicializado
Junto con explicar que las pericias progresan dentro de un contexto desjudicializado, el abogado manifestó que no se puede adelantar alguna figura legal determinada. Una conclusión que se obtendrá en mérito a los informes policiales que se están desarrollando.
Clave para estas hipótesis delictivas es la declaración de las víctimas. Una de ellas, quien incluso con su comparecencia ante el ente persecutor para dar cuenta de los hechos que la afectaron motivó la acusación de la otra joven, tiene programada una reunión con el persecutor para la próxima semana.
Esta denunciante de 24 años recalcó que lo que califica como una verdadera "humillación" ocurrió en abril, cuando acudió por primera vez a la consulta de este médico para tomarse una ecografía por problemas en su rodilla derecha.
"Tenía que hacerme una 'eco' a las dos rodillas, pero compré un bono, así que me dijo (el especialista) que me podía hacer la otra como gratis", resaltó como preludio la joven, quien describió la sala donde se atendía como amplia, donde se encontraban los instrumentos en un lado y otro lugar separado por una especie de ventanal polarizado, donde permanecía la secretaria que anotaba las indicaciones que realizaba el facultativo a viva voz.
La primera situación compleja para la denunciante fue al instante de terminar la revisión en su extremidad inferior.
"Para este examen ponen un líquido y luego pasan un papel para que uno se limpie, pero él me empezó a limpiar la pierna, sin utilizar guantes, ahí empecé a sentirme incómoda", relató la fuente.
Sin embargo, el tema más grave habría sucedido a continuación, como afirmó la mujer, enfatizando que el profesional le preguntó si tenía algún problema en la espalda para examinarla.
"Le dije que tenía lordosis y me indicó que podía verme, generando todo un ambiente propicio de confianza... Me explicó de todo, hablaba en todo momento y me dijo que necesitaba que me sacara la ropa para ver el tema de la espalda, accedí entendiendo que podía quedarme con ropa interior, pero me dijo que necesitaba sacarme todo para ver los huesos, el tórax", expuso.
Sentimiento
Posteriormente, la joven reconoció que accedió a desnudarse. "Me sentía horrible, no entendía por qué hacía eso", sostuvo, agregando que "el doctor me dijo que necesitaba sacar una foto y me sacó una de espalda con su teléfono personal. Luego, me hizo darme la vuelta y me explicó de la clavícula y otras cosas, hablando todo el rato y yo esperando en qué momento me podía poner la ropa".
Incluso, la acusadora aseguró que el médico "me tocó extrañamente en lugares que no entendía por qué lo hacía", sumando que hasta le explicó los problemas lumbares que tenía mientras ella seguía sin su vestimenta.
Después de salir de la consulta, con la sensación de sentirse vulnerada, la joven tomó contacto con un médico conocido para contarle lo sucedido. De inmediato, recibió la confirmación que el procedimiento habría sido irregular. Lo mismo le comentó un traumatólogo a quien acudió, el cual le manifestó que el hecho es "grave", no corresponde una práctica así y la instó a notificar el caso.
Y la denuncia no tardó en concretarse. Al día después de este incidente, la paciente llegó al Ministerio Público a materializar la denuncia y ponerse a disposición de las diligencias que sean necesarias para esclarecer lo que pasó y buscar sanciones.
Igualmente, la vecina castreña expuso que desde el centro médico donde trabaja el denunciado se contactaron con ella, "pero pusieron en tela de juicio lo que me pasó", acotó, agregando que "una semana después me citaron a una reunión para que tratáramos el tema 'como adultos'... me sentí muy cuestionada y no accedí, qué teníamos que conversar si lo que sucedió fue un delito".
Junto a los antecedentes que interpuso en la Fiscalía, la joven tomó contacto con el Fono Mujer para recibir orientación y también denunció vía internet ante la Seremi de Salud, confesando que como paciente tenía derechos, como el respeto y la dignidad, los que asegura fueron violentados con esta acción.
La cruda experiencia vivida por esta mujer se conoció por las redes sociales, donde recibió apoyo y también fue el impulso para que otra joven, de unos 22 años, se atreviera a denunciar un evento similar ocurrido, eso sí, el año pasado. Incluso, la dinámica sería la misma, lo que se repite con el caso del 2014 que se reabrió.
Gremio
Al igual como en otros casos en que profesionales de la salud han sido cuestionados por malas prácticas o derechamente por su responsabilidad en delitos perpetrados en la provincia, el Colegio Médico de Chiloé tomó conocimiento de los hechos. No obstante, por éste en particular se informó que esperarán que la indagatoria esté formalizada para manifestar una postura.
En tanto, el especialista cuestionado pese a los intentos realizados para que entregara su opinión, declinó referirse a la situación que se encuentra en pleno proceso investigativo.
"Me dijo (el doctor) que necesitaba que me sacara la ropa para ver el tema de la espalda (...) Luego, me sacó una foto de espalda con su teléfono personal".
Paciente de 24, años que denunció."
24 años tiene la joven que denunció en abril y que la otra semana declarará en Fiscalía.