Eduardo Burgos Sepúlveda

Luego de recorrer cielo, mar y tierra, buscando apoyo para financiar la operación de su pequeño hijo Marcos Oliva (5), la madre del niño fue sorprendida en las últimas horas por un mensaje del multimillonario Andrónico Luksic, quien le avisó que costearía parte importante de la intervención que debe realizarse en Santiago.

Cristina Soto, la madre de Marquitos, realizó bingos, shows bailables, rifas, baratillos, completadas, colectas y un sinfín de actividades para reunir los 6 millones de pesos que cuesta la operación de su hijo, que padece un nevus congénito gigante, con una malformación vascular que debe ser extirpado, según los análisis de los especialistas.

"Hay veces que no puede dormir por la picazón que le produce esta enfermedad y es él mismo el más interesado en que se realice la operación, puesto que ya no quiere seguir esperando", señalaba Cristina, meses atrás, advirtiendo que la afección es de nacimiento, como un lunar gigante en unos de sus brazos y ha ido creciendo con los años, lo cual complica al pequeño Marcos porque le impide realizar algunas actividades normales para el resto de los niños.

Según lo que relató la progenitora del pequeño, se enteró hace un par de meses de un fugaz paso del empresario por Ancud, donde supuestamente venía a entregar su apoyo económico a otro drama social de la provincia, así que decidió contactar a Luksic para pedirle su cooperación.

La ancuditana no logró encontrarlo en persona, así que intentó en innumerables veces comunicarse con él a través de su cuenta de Twitter, enviándole repetidos mensajes que nunca eran respondidos.

"Es que yo dejaba mi cuenta Rut y mi número telefónico de contacto y todas les veces que envié mensajes por Twitter fue así y hace unos días me di cuenta que estaba poniendo mal mi teléfono", relató Cristina, agregando que "él me dijo que había estado tratando de contactarme varias veces y su secretario me dijo que 'siempre ponía el número que terminaba en 2422 y hoy terminaba en 3 y pudimos llamarte'".

El acto humanitario de Luksic cubrirá 2 millones de pesos de la operación, con lo que esta podrá llevarse a cabo en corto plazo, enfatizó Cristina, reconociendo que desde que recibió el llamado no ha podido quitarse la sonrisa del rostro e, incluso, le ha costado dormir de la emoción, por la que calificó una de las más grandes alegrías de su vida.

Feliz

"Estoy muy feliz y hasta lloré de la emoción y no podía parar de llorar de la emoción, ni comer siquiera", recordó la mamá de Marquitos, detallando que a fin de mes solicitará ya la hora para realizar la anhelada operación a su pequeño.

Agregó la alegre mamita ancuditana, que de todas formas cumplirá con un último evento este fin de mes, que es una cumbre ranchera, con lo que piensa conseguir recursos para la estadía en Santiago durante la operación de su pequeño, que tendrá que estar internado a lo menos 3 semanas.

"Ya llevé a Marcos a su último control y lo encontraron bien en todo, solamente que le creció una pelotita más en su brazo, que en el hospital de Puerto Montt me dijeron que estaba dentro de la normalidad", apuntó Cristina.

"Todavía estoy muy emocionada, con una alegría tremenda", recalcó la fuente, subrayando que estaba muy agradecida a todos quienes la apoyaron en esta lucha, entre ellos la Agrupación Ayúdanos a Ayudar, de la que ella es parte. "Existen muchos casos a los cuales se puede ayudar, niños como mi hijo Marcos que debemos apoyar. Hoy por mi mañana por ti", recalcó. También agradeció públicamente a los miembros del grupo de Facebook "Chiloé Solidario, que se sumó a su campaña.

"Estoy muy feliz y hasta lloré de la emoción y no podía parar de llorar de la emoción, ni comer siquiera".

Cristina Soto."

Cristina Soto,, mamá de Marcos"

"Él me dijo que había estado trantado de contactarme"

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