Carolina Larenas Faúndez

Menos habitantes de lo esperado en Chiloé, cuatro comunas con población decreciente, dudas respecto a la aplicación del instrumento son solo algunos de los análisis realizados tras conocerse los datos del Censo que se aplicó en abril pasado.

De acuerdo a los datos entregados por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), en la provincia residen 168 mil 185 personas, solo 13 mil 419 más que hace quince años cuando se aplicó el último Censo.

Incluso, la cifra es 20 mil 197 personas más baja que la proyección de población que el propio organismo había realizado para este año. Además, respecto al fallido ejercicio del 2012 hay solo 526 habitantes más en Chiloé, en esa ocasión el número llegaba a 167 mil 659.

Más mujeres que hombres hay en el Archipiélago, según las cifras del INE. Las primeras alcanzan las 84 mil 622 personas y los segundos, 83 mil 563.

También llama la atención de los datos definitivos entregados en las últimas horas, que solo 13 mil 552 personas es la diferencia entre el total de población y las personas que estaban habilitadas para votar en las últimas elecciones en el territorio insular (154.633). Sin embargo, de acuerdo al INE, 46 mil 514 personas tienen menos de 19 años en Chiloé.

Castro es la comuna que concentra la mayor cantidad de población en la provincia con 42 mil 807 personas, cifra que es solo 4 mil 441 más que lo que tenía hace 15 años y muy por debajo de la proyección que estimaba, por el propio INE, a este 2017 un total de 49 mil 451 habitantes.

Si bien Ancud es una de las comunas más pobladas de Chiloé con 38 mil 991 habitantes, este Censo arrojó la particularidad que decreció en relación al 2002 cuando se contaron 39 mil 946 personas; es decir, 955 más.

La cifra para la comuna de río Pudeto también es menor si se compara con los datos del fallido proceso de hace cinco años cuando totalizaba 40 mil 819 y a los 44 mil 249 habitantes proyectados en 2017.

La tercera comuna con más población en el Archipiélago es Quellón con 27 mil 192, creciendo en 5 mil 369 personas comparado con hace quince años, pero también más bajo que la proyección que calculaba 31 mil 703 habitantes para este año.

En 3 mil 69 habitantes creció Dalcahue en el período entre censos. De esta forma, ahora la población llega a 13 mil 762 personas, aunque en este caso también el número es menor a las proyecciones (15.927).

Otra de las comunas que aumentó su población fue Chonchi que, de acuerdo a los datos del último Censo, tiene 14 mil 858 vecinos; es decir, 2 mil 286 personas más que lo reportado en el 2002. Sin embargo, también es menor a lo que se estimaba para este año (15.494).

Pese a que su población se incrementó en los últimos años, Curaco de Vélez es la comuna con el menor número de habitantes en la provincia, sumando 3 mil 829 personas, 426 más que hace 15 años. Otra que también creció fue Queilen que totalizó 5 mil 385 en la última medición, lo que se traducen en 247 personas más que en el 2002.

Junto con Ancud, también hubo otras comunas que reflejaron un decrecimiento de su población en los últimos años.

Una de ellas es Puqueldón que disminuyó sus habitantes en 239 entre censos. De esta forma, en el último proceso alcanzó a los 3 mil 921 vecinos y hace quince años contaba a 4 mil 160. Incluso, el número es menor a lo reportado en el fallido proceso del 2012, en el que alcanzó las 4 mil 102 personas.

Quemchi es otra de las comunas en la que la población bajó. En el último proceso se encuestaron a 8 mil 352 personas, lo que refleja una baja de 337 habitantes en los últimos 15 años. Su proyección para estas fechas era de 9 mil 48.

Asimismo, 888 vecinos menos tiene Quinchao según el último informe. Ahora suma 8 mil 088 personas y en el 2002 su población era de 8 mil 976, mientras que lo que se pensaba podría tener este año era 8 mil 759.

Aprehensiones

Sus dudas sobre el proceso planteó el alcalde de Ancud, Carlos Gómez, tras conocerse los resultados del Censo Abreviado 2017, que en esa comuna vivió la situación más compleja por la falta de encuestadores el día de la medición, lo que incluso se debió completar posteriormente.

A juicio, del jefe comunal este problema sumado a la alta ruralidad que presenta la comuna pudo contribuir a que existan vecinos, sobre todo de sectores apartados que no habrían sido censados.

"También hay algunas familias que por falta de fuente laboral han emigrado a otras comunas, pero en general no veo que exista una baja de habitantes. Solo en el tema del per cápita (inscritos en la salud municipalizada) tenemos 40 mil y también un déficit habitacional para mil familias en el sector urbano, por lo que esta cifra del Censo me causa algunas dudas", relató el político.

A su vez, el alcalde de Castro, comuna -donde también se reportaron problemas con el proceso de abril de este año-, Juan Eduardo Vera (UDI), calificó como "dudoso" el resultado del Censo, considerando que siempre ha pensado que la comuna está muy cerca o incluso sobrepasa los 60 mil habitantes.

"Cuando uno analiza el per cápita que tenemos a nivel comunal que se está acercando a los 50 mil, obviamente se generan dudas de las cifras que arrojó el Censo, pero al mismo tiempo soy respetuoso de las instituciones del Estado y me imagino que todo este proceso ha sido certificado como corresponde", detalló el militante de la Unión Demócrata Independiente.

Igualmente, comentó que "las dudas se generan porque se señaló que este censo abreviado tenía una metódica distinta al que se había realizado en el anterior Gobierno y en ese Censo nosotros habíamos llegado a una cifra muy cercana a esta, por lo tanto, es de esperar que las cifras que se entregaron sean las reales".

En tanto, para el alcalde de Quellón, Cristian Ojeda, las cifras también son sorpresivas, ya que las proyecciones daban cuenta que la población superaría las 32 mil e incluso las 35 mil personas. Ello, también considerando que lo que la comuna recibe por concepto de per cápita en la atención primaria bordea los 27 mil usuarios.

"Pudo haber pasado algo, no tengo los antecedentes totales, pero sí hemos visto una baja en la industria salmonera y en la pesca artesanal y eso ha hecho que emigren algunas personas, pero en realidad no sabemos el porcentaje", puntualizó el geógrafo.

En el último proceso participaron los municipios, el INE y funcionarios públicos, además de voluntarios.

"Las dudas se generan porque se señaló que este Censo abreviado tenía una metódica distinta".

Juan Eduardo Vera,, alcalde de Castro."