Pedro Bárcena González

Reflejando que constituye un flagelo siempre presente en la provincia y que como bofetada algunos casos revelan la vulnerabilidad de las víctimas, como la ineficacia de las medidas precautorias, dos sujetos quedaron presos por su responsabilidad en salvajes agresiones contra sus parejas. Incluso, uno de estos ataques se produjo en la vía pública, en Castro Alto.

Justamente, este último hecho generó impacto por el grado de ferocidad empleado, en el cual una joven de 39 años fue atacada con golpes de puños y hasta con una piedra en la cabeza, sufriendo lesiones diversas especialmente en el cráneo.

Los antecedentes notificados a la Central de Comunicaciones de Carabineros motivaron un procedimiento policial que llevó a una patrulla a las inmediaciones de las calles Edmundo Pérez Zújovic y Galvarino Riveros, donde se constató la presencia de una mujer tendida en la calle.

Así lo confirmó el capitán Esteban Escobar, jefe subrogante de la Segunda Comisaría, añadiendo que los funcionarios "vieron a la afectada sangrando por una serie de golpes hasta con un objeto contundente. Al subirla a la unidad buscan al presunto responsable por las inmediaciones, sin lograr hallarlo".

Sin embargo, como especificó el oficial, al ser remitida la paciente a constatar lesiones al Hospital Augusto Riffart, "ella puede reconocer al hombre en el recinto, lo sindica como el autor de sus lesiones, por lo cual se produce la detención".

En audiencia realizada el lunes en el Juzgado de Garantía de Castro, la magistrada Jésica Yáñez acredita la legalidad del procedimiento policial. En la misma audiencia, el fiscal Luis Barría procedió a formalizar al comerciante de iniciales D.V.B. (40) por los delitos de desacato y lesiones menos graves en contexto de violencia intrafamiliar (VIF).

Como explicó el persecutor, el imputado tenía prohibición de acercarse a la víctima, incluso hasta de ingresar a la provincia, por dos causas similares generadas en julio, siempre en perjuicio de la misma vecina.

Por el quebrantamiento de estas medidas y la nueva agresión, el abogado solicitó la prisión preventiva "por el evidente riesgo que constituye la libertad del imputado para la seguridad de la víctima y la sociedad". Un fundamento que se sustenta también al considerar que el sujeto tiene múltiples condenas anteriores, incluso por robo con violencia y un homicidio del año 2005.

Dictamen

La jueza acogió la cautelar, a pesar de la oposición del defensor Nelson Troncoso, quien alegó que las sentencias anteriores estarían prescritas y que en esta decisión no operó el principio de proporcionalidad.

"Acá existe un concurso de delito. Y siendo el desacato el más gravoso, llegando a una eventual condena mi representado podría acceder a una pena sustitutiva, por lo cual la prisión preventiva es exagerada", enfatizó el profesional.

Al mismo tiempo, se decretó un plazo indagatorio de 60 días, en el cual no solo avanzará la acción penal, sino también se espera brindar todo el apoyo posible a la afectada, quien tiene dos hijos con el imputado.

Por ello, desde el Centro de la Mujer Chiloé ya se está analizando su caso, incluso desde la atenta mirada institucional desde la capital regional.

Lo mismo pasa con un hecho anterior, pero que también en las últimas horas llevó a la cárcel a un joven por las constantes agresiones contra su pareja.

Se trata del obrero de iniciales G.D.L. (34), quien fue detenido en Santiago tras ser sindicado por su cónyuge como el responsable de una bestial embestida al interior de la casa que compartían en el sector alto de la capital chilota.

En el domicilio y tal como consta en el parte de Carabineros, el sujeto en medio de una ingesta de alcohol ingresó al dormitorio donde se encontraba la afectada y en presencia de los dos hijos que tienen en común, de apenas 13 y 2 años, le exige dinero para seguir bebiendo.

"El hombre la agredió, la tomó del cuello y amenazó con dos cuchillos a la mujer", indicó el fiscal Barría, sumando que este imputado "tiene cinco condenas anteriores por VIF contra la misma víctima".

Audiencias

El delincuente huyó del sitio del suceso y en Renca, Región Metropolitana, fue ubicado dos meses después de este último ataque. Por ello, gracias a una orden de aprehensión fue capturado, controlado el viernes en el Quinto Juzgado de Garantía de Santiago y luego formalizado el lunes en Castro por lesiones menos graves y amenazas en contexto de violencia intrafamiliar.

El antisocial quedó preso por constituir un peligro para la sociedad y por el evidente riesgo de fuga. Además, la magistrada Jésica Yáñez dictó un plazo de 60 días para investigar la causa.