Ancud: recuerdan gran movilización
Pescadores artesanales de la Mesa de la Marea Roja y autoridades conmemoraron el gran paro del año pasado.
En una ceremonia íntima, realizada en el Teatro Municipal Mauricio de la Parra, pescadores artesanales, autoridades locales y provinciales, invitados especiales y quienes apoyaron la paralización de entonces, se recordó el gran estallido social de Chiloé en mayo del 2016.
La actividad fue convocada por la Mesa de la Marea Roja de Ancud, que agrupa a los artesanales movilizados hace un año y fue la última en claudicar con la toma de Chiloé, hace poco más de un año, luego de negociar una salida con el Ejecutivo, la cual reclaman no fue cumplida por su contraparte.
"Hicimos un acto donde hubo un poco de música y pasamos imágenes de recuento de lo que se vivió durante las movilizaciones de mayo del 2016", detalló el presidente de la mesa y exvocero del movimiento artesanal hace un año en esta misma comuna chilota, Pablo Oyarzo.
El dirigente precisó que además se invitó a algunas autoridades y otras personas que colaboraron con los suyos durante el paro que fue desde el 2 al 19 de mayo. "Se rindió homenaje a alguna gente que estuvo con nosotros y fue bien bonito", recalcó.
Durante la cita también se dio la oportunidad para que los asistentes relataran su experiencia personal vivida en el estallido social y la actual situación de quienes fueron favorecidos y no por los ofrecimientos del Gobierno, personificado en la figura del ministro coordinador Luis Felipe Céspedes.
unidad
"Las cosas destacables de esta movilización fueron la unidad y que no se había visto nunca una movilización de 19 días (sic) donde no haya habido ningún drama, porque de la ayuda no podemos destacar nada, así que dimos a conocer lo poco que se dio, que tampoco lo desconocemos, porque también sirvió a la gente", sumó Oyarzo.
Reclamó el dirigente de los resultados de las negociaciones con el Gobierno, que si bien al comienzo se veían fructíferas, a un año del desastre "no es lo que se esperaba de los organismos del Estado, como Corfo, Indap y otros, que ofrecieron ayuda en proyectos y fueron cosas inalcanzables para los pescadores artesanales y buzos afectados por la marea roja, donde los cupos fueron muy pocos y además había que poner contrapartes en dinero de más de un millón de pesos".