Pedro Bárcena González

Con el objeto de establecer las figuras delictivas que se pueden configurar tras sendas denuncias interpuestas en la Fiscalía de Castro, por presuntos ultrajes contra siete niñas de parte de conductores del transporte escolar, detectives de la Brigada Investigadora de Delitos Sexuales y Menores (Brisexme) se encuentran realizando diligencias en la capital chilota como en Queilen.

Los primeros antecedentes puestos a disposición del Ministerio Público emanaron respecto a la vulneración que habría sufrido una estudiante de la Escuela Álvaro Vargas Miranda, en el trayecto entre su casa, en el sector de Agoní Alto, y el recinto educativo municipalizado.

Los datos fueron conocidos por el fiscal de turno, Cristian Mena, quien recalcó que desde este lunes se están instruyendo las pericias para esclarecer lo sucedido y determinar si existen otros infantes comprometidos.

El persecutor manifestó que este caso "se centraría en tocaciones en las piernas de la víctima", lo que también incluiría "pellizcones", lo cual busca ser esclarecido con las pericias que se están efectuando y la declaración de la misma afectada.

Un equipo policial ya se constituyó en el centro de enseñanza queilino, en busca de recoger en terreno mayores evidencias para sustentar la indagatoria.

Diligencias

Así lo confirmó el subjefe de la Brisexme, Jaime Tobar, añadiendo que "las primeras diligencias tras la denuncia consistieron en la constitución del personal en la escuela, el cual comenzó a recabar los documentos y datos preliminares".

La orden de investigar está vigente y se espera recabar la mayor cantidad de información. Ello, como aclaró el comisario, "para establecer fehacientemente el delito en estudio".

Por el momento, no existe claridad completa sobre la dinámica de estas supuestas agresiones, aunque se enfocan en el espacio del traslado de la escolar. Eso sí, el oficial fue claro en señalar que "aún no se sabe cómo ocurrieron los hechos, por lo cual estamos abocados en ubicar testigos presenciales, otros medios de pruebas, analizar el supuesto sitio del suceso, para luego llegar a la eventual identificación y ubicación del imputado".

En tanto, la directora de la escuela queilina, Marcia Vera, declinó entregar mayores datos del caso como "protección" a la escolar.

Operar

Por su parte, la misma dinámica investigativa se está empleando por el otro caso que involucraría a seis menores de la Escuela Ana Nelly Oyarzún de Nercón, cuya denuncia ingresó de oficio este lunes a la Fiscalía de Castro, después de la notificación realizada por el director del establecimiento Jorge Díaz, quien de inmediato informó sobre lo sucedido tanto al ente persecutor como a la Corporación Municipal para la Educación, la Salud y la Atención al Menor.

Justamente, el abogado de esta entidad, Alex Galindo, confirmó esta rápida reacción como obligación legal de los educadores al verse enfrentado a un caso de presunta vulneración infantil.

Según explicó el jurista, el directivo tomó conocimiento del hecho, "tras el relato que entregaron seis niñas del colegio a sus profesoras. Son menores de diferente ciclo". Con estos datos se ofició directamente al Ministerio Público.

El profesional resaltó que considerando los escuetos antecedentes que se cuentan al día de hoy, centrados solo en la versión inicial de las estudiantes afectadas, "podría existir el eventual delito de abuso sexual", por lo cual se activó toda la red y maquinaria protocolar para abordar estas situaciones, no solo a nivel persecutor, sino también de protección de las alumnas y atención sicosocial de las mismas.

Asimismo, el abogado enfatizó que dentro de las primeras medidas que tomaron fue "apartar" de la conducción del transporte escolar al sospechoso.

"Esta persona es el dueño y chofer del vehículo que realiza varios recorridos por diferentes sectores para trasladar a los niños. Ante esta situación y considerando que no se puede dejar sin transporte a los menores, hicimos una modificación a su contrato, un anexo para que el conductor sea otra persona", apuntó Galindo.

Este constituye el primer paso asumido desde la corporación, aunque ya se avizoran nuevas acciones tendientes a prestar el máximo apoyo a los estudiantes y sus familias. "Con el avance de la investigación y una vez que exista mayor claridad de los hechos, la cantidad de víctimas y la existencia de delitos, nos haremos parte como querellantes", sostuvo.

Sename

Una postura similar tomaría el Servicio Nacional de Menores (Sename) de Los Lagos, por considerar estos casos como serios y que requieren de la mayor preocupación del organismo.

La directora regional de la entidad, Pamela Soto, manifestó por estas supuestas agresiones que "hemos recibido los primeros antecedentes de estas graves denuncias y dispusimos la activación de nuestro protocolo de acción frente a casos de alta connotación".

La personera puso especial atención a lo sucedido con los educandos de Nercón, debido a la cantidad de denuncios enfocados en un solo transportista.

"Este es un antecedente gravísimo sin dejar de lado al otro sujeto denunciado. Esperamos que nuestra Oficina de Protección de Derechos haga a la brevedad el levantamiento de identificación de las víctimas para preparar la presentación de una querella en los tribunales competentes y solicitar las cautelares que correspondan para iniciar los procesos de diagnóstico y reparación", dijo la profesional.

A su vez, la titular del Sename en la región expresó que "es lamentable que pese a todos los esfuerzos, estos graves delitos contra la niñez sigan apareciendo, pero no debemos bajar los brazos, la ciudadanía, las familias y las víctimas deben denunciar, deben saber que estamos con ellos y los apoyaremos".

"El director supo del caso tras el relato que entregaron seis niñas del colegio a sus profesoras".

Alex Galindo,, abogado de la Corporación Municipal de Castro."

"Es lamentable que pese a todos los esfuerzos, estos delitos contra la niñez sigan apareciendo".

Pamela Soto,, directora del Sename."

6 menores de Nercón habrían contado a sus profesoras estos hechos.