El martes 4 de abril a las 10 de la mañana en el Tribunal Ambiental de Valdivia se realizará la audiencia pública para resolver una serie de reclamaciones contra el megaproyecto conocido como Parque Eólico Chiloé de la empresa chileno-sueca Ecopower y que desde la década pasada pretende instalarse en el norte de la Isla.

Dichos reclamos fueron ingresados por el Movimiento de Defensa de Mar Brava-Lacuy, Salvemos Mar Brava y el estudio jurídico ambiental de la organización no gubernamental FIMA, "con motivo de la última resolución emitida por el Comité de Ministros durante el mes de agosto de 2016, la cual dio nuevamente luz verde a este nefasto proyecto", señala un comunicado de las organizaciones.

El mismo texto sostiene que su rechazo al proyecto energético por una inversión de 250 millones de dólares se debe a "los múltiples impactos ambientales que generará la instalación" del parque que pretende producir energía eléctrica a partir del viento, explicando que "acudimos ante esta instancia, confiando en el nuevo órgano jurisdiccional de los tribunales ambientales cuya función es resolver especialmente este tipo de conflictos medioambientales".

argumento

Los activistas argumentaron que esperan que ante el organismo judicial prime la importancia ambiental del sector. "Esperamos poder realzar ante dicho organismo la importancia y fragilidad de Mar Brava, y que opte por la protección del medio ambiente rechazando el proyecto Parque Eólico Chiloé, garantizando así la subsistencia del Sitio de Importancia (Hemisférica) para las Aves en el humedal de Quilo -sitio reconocido como área importante para la conservación de aves (IBAs) -, las colonias de pingüinos de Humboldt y Magallanes del Monumento Nacional (sic, Natural) Islotes de Puñihuil, las ballenas que llegan hasta las costas de Mar Brava y el golfete de Quetalmahue", consigna el escrito difundido ayer.

A su vez, las agrupaciones aseveran que buscan garantizar la continuidad de las actividades económicas del sector, como el turismo de naturaleza y la extracción de recursos bentónicos.

El año pasado, el Comité de Ministros resolvió desechar los argumentos de las organizaciones reclamantes, aduciendo que las observaciones fueron abordadas debidamente durante el proceso de evaluación de impacto ambiental del proyecto.

La iniciativa de Ecopower busca instalar 42 aerogeneradores de 2,4 MW cada uno, con una potencia de 100,8 MW, entregando energía al Subsistema Chiloé, y de esta forma, aumentando la potencia y energía del mismo, dentro del Sistema Interconectado Central (SIC).

Al cierre, no hubo pronunciamiento desde Ecopower.