Nelson Soto Asencio

Los vecinos de Pudeto Bajo, la mayoría pescadores artesanales de la comuna de Ancud, no lo han pasado bien gran parte de este año producto de la contaminación del mar por efecto de la marea roja, no pudiendo trabajar.

Solo como ejemplo: más de una cincuentena de hombres de mar y sus familias todavía desarrollan los sábados y domingos una olla común en la sede del popular sector, donde algunos residentes del lugar van a almorzar.

Sin embargo, estos chilotes quieren salir de esta situación y para ello están insertos en un proyecto de intervención social en seguridad pública denominado "Pudeto Bajo participa y se fortalece", iniciativa que es ejecutada por la Subsecretaria de Prevención del Delito, la Municipalidad de Ancud y la Junta de Vecinos N°6.

Jennifer Hidalgo, coordinadora, detalló que la iniciativa fue postulada por los habitantes del barrio al Fondo Nacional de Seguridad Pública y el objetivo es entregar la mayor cantidad de información a las personas sobre seguridad. Pero no solo apunta a ese fin, sino que también los vecinos participan de talleres de yoga, deporte, huerto familiar y baile entretenido y próximamente inaugurarán una biblioteca comunitaria en la sede social.

Las personas beneficiadas sobrepasan las 500 y el proyecto tiene un costo de 31 millones de pesos, al que se le sumará un millón más por la concreción de la biblioteca.

Dirigencia

Para el presidente de la Junta de Vecinos de Pudeto Bajo, Javier Mercado, la intervención permite a los pobladores obtener herramientas para prevenir delitos en sus hogares, por lo que son atendidos por un abogado y una asistente social provenientes del consistorio local. Además, los lugareños disfrutan de diversos talleres de entretención.

"La idea es que participen todos los vecinos para analizar las deficiencias que hay en la población, ya que postulamos a este proyecto sin pensar que íbamos a salir favorecidos. En el futuro iremos haciendo reuniones con los vecinos para ver qué otros talleres quieren ellos y la idea es hacerlos participativos", sostuvo el líder social.

Sumó el dirigente que la iniciativa durará 10 meses, culminando en diciembre de este año. "Es bueno que con los vecinos saquemos a flote la población y participen niños, jóvenes, adultos y adultos mayores para que entre todos le cambiemos la cara al barrio. Pero a los vecinos hay que seguirlos incentivando para que participen", recalcó.

En cuanto a la situación por la marea roja, Mercado mencionó que se busca que se dicten otros talleres que permitan aprender algún oficio para laborar.

"Queremos que la gente se capacite, por ejemplo, en mueblería, porque la estamos pasando mal con la marea roja y queremos ver si la gente puede salir del rubro (mar) un poquito y dedicarse a otras cosas. Este programa nos ha servido para que los vecinos se distraigan, vienen a participar los niños, adultos mayores y queremos integrar más a los jóvenes. Ahora estamos con un programa de huerto y ojalá vengan más cosas", apuntó.

Por su parte, Jaime Parra, monitor de deporte, valoró la posibilidad que tiene de trabajar con niños de su sector para olvidarse por un rato de los problemas de la pesca y cesantía que viven varios de sus vecinos.

"Yo igual vivo del mar, mi papá tiene embarcaciones y buzos; esta posibilidad de trabajar con los niños me vino igual por el tema de la marea roja, allí conocí a la asistente social y me pidió que trabaje con los niños, es una muy buena oportunidad. A mi taller llegan aproximadamente 20 a 25 niños, mínimo 15 de todo el sector: Padre Hurtado, Ribera Sur, Ex Cancha de Huasos, Emergencia y Cruz Roja", puntualizó.

Añadió este encargado que la intervención ha ayudado a que los menores tengan una alternativa de entretención y para ello se reúnen las tardes de los lunes, miércoles y viernes en el gimnasio de Ribera Sur.

Adulto mayor

El Club del Adulto Mayor Las Hormiguitas de Pudeto Bajo es la entidad más favorecida, ya que sus integrantes disfrutan al máximo de los diversos cursos que se desarrollan en la sede vecinal.

"Yo creo que este proyecto ha sido de gran utilidad para el barrio que lo ha sabido apreciar. Para nosotros, los adultos mayores, han sido de mucha utilidad y estamos muy agradecidos porque en lo que es salud mental mejora la calidad de vida, hacer ejercicio y yoga en el caso nuestro es importante y nuestra profesora es espectacular", calificó Doris Agüero, la presidenta de la agrupación.

Por su parte, la alcaldesa Soledad Moreno, quien efectuó una reunión con dirigentes y otros vecinos pudetanos, aseveró que a pesar de los diversos problemas que enfrentan los isleños este programa viene a ayudarlos.

"Que Pudeto tenga este programa se debe aprovechar, por eso hice un llamado a quienes están al frente de este proyecto a usar la red municipal, ya que se puede dar respuesta a quienes quieran capacitarse", indicó la jefa comunal.

A su vez, Cristián Gallardo, quien dicta el taller huerto comunitario, compartió que los lugareños están entusiasmados en aprender técnicas que les permitan dar un mejor uso a la tierra.

"El taller consiste en recuperar la tierra que está en muy baja materia orgánica y aprovechar los espacios cuando son limitados. El avance es un poco lento porque la recuperación de la materia orgánica es lenta, pero también estamos trabajando los huertos colgantes", puntualizó.

Los favorecidos ponen buena nota al programa y esperan que siga la intervención, a pesar de los momentos difíciles que le ha tocado vivir al barrio por la marea roja y la cesantía.

Así, el nuevo desafío para estos ancuditanos es lograr salir de esta crisis que los afecta y por ello quieren seguir con este tipo de programas que en algo les alivia esa preocupación.

"La idea es que participen todos los vecinos para analizar las deficiencias que hay en la población".

Javier Mercado,, presidente de la Junta de Vecinos Nº 6 Pudeto Bajo."

"El programa ha sido de gran utilidad para el barrio que lo ha sabido apreciar" .

Doris Agüero,

presidenta del Club del, Adulto Mayor La Hormiguita."