Chilotes indignados con el gobierno por estudio de crisis
Informe de Greenpeace provocó reacciones que van desde llamados a demandar de forma colectiva al Estado, hasta desconocer los emblemas nacionales para estas Fiestas Patrias, no descartando incluso volver a las calles a protestar.
Más de un centenar de personas asistió el fin de semana a la presentación del informe del estudio científico independiente que Greenpeace realizó sobre la crisis socioambiental ocurrida en mayo en las costas de Chiloé, donde se culpó directamente al gobierno de decidir "sacrificar a Chiloé en favor de la industria de la salmonicultura".
Las reacciones de los asistentes y de quienes se han informado posteriormente del estudio -ayer se presentaba en Castro- no se han hecho esperar y son más que aireados de rabia contra el Ejecutivo, postulando los vecinos desde una demanda colectiva al Estado hasta protestas que incluirían no izar la bandera de Chile para Fiestas Patrias, en señal de rebelión.
La principal conclusión de la investigación del grupo ambientalista fue la que más indignó a los chilotes, donde dice que "si bien el bloom de algas estaba presente en la zona con anterioridad al vertimiento, el salmón vertido actuó como un 'fertilizante' de éste, aumentando su magnitud, intensidad y alcance. Esencialmente la decisión del gobierno de autorizar el vertido en descomposición en la misma zona que ya presentaba bloom, empeoró la situación desencadenando la crisis social y ambiental en Chiloé", señala el estudio.
A esto se sumó otra de las reflexiones, donde se indicó que "el gobierno afirmó conocer de la pre existencia de este bloom y pese a ello autorizó el vertido de 9.000 toneladas de salmones en el área (de las cuales casi 5.000 toneladas fueron vertidas), en un periodo de 15 días".
En este punto, las pesquisas de los ambientalistas detallaron que "los salmones en proceso de descomposición producen altas cantidades de amonio (NH4) que corresponde al nutriente y alimento 'favorito' de las microalgas, particularmente las de tipo dinoflagelados (que pueden generar bloom tóxicos o marea roja)".
Abono
El vertimiento, por consecuencia, actúo como "abono" para el bloom de algas, estimulando el desarrollo y crecimiento de estas microalgas.
Otro de los puntos argumenta que "el gobierno no estudió ni documentó los impactos que tendría el vertimiento sobre el bloom de microlagas y el posible desarrollo de Floraciones Algales Nocivas (FAN) o marea roja", aduciendo a que se entregó el permiso de vertimiento en solo un día a contar de la solicitud.
"Tenemos que comenzar a analizar este informe para ver de qué forma vamos a enfrentar al gobierno, para que nos paguen todo este daño que nos vinieron a hacer a nuestra querida Isla de Chiloé", afirmó Francisco Vera, dirigente de Caulín, añadiendo que "todas las organizaciones, vecinales, de buzos, de recolectores, tenemos que ver cuál va a ser nuestro norte, pero con Greenpeace a la cabeza, con ellos como el pie de apoyo" para las acciones que decidan llevar adelante, explicó.
Ministro
Por otro lado, la dirigente de recolectores de orilla, Teresa Calfunao, indicó que "tengo mucha rabia con el gobierno, pero mucha más con este caballero (ministro Luis Céspedes), que no le interesó que algunos de nosotros pudiéramos haber muerto, solo para que sus industrias y sus bolsillos se llenen más", añadiendo que "es la hora de que todos nos unamos y podamos defender a nuestro Chiloé".
Por otro lado, María Santana, también dirigente de recolectoras de orilla, destacó que "ahora es la oportunidad de que todos los ancuditanos gritemos nuestro derecho al mar, porque aquí nos vinieron a envenenar nuestro mar", sumando que "Dios nos está concibiendo este momento para que luchemos, porque el gobierno tiene que hacerse cargo del daño que causó, ahora, porque no solo hay hermanos pescadores, sino que también trabajadores de salmoneras, que los están echando a todos".
Amaya Chijani, coordinadora de Ancud del Movimiento Indignados de Chile, agregó a los descargos de los vecinos que por lo general las organizaciones locales no cuentan con los medios para argumentar ante las autoridades este tipo de situaciones, agradeciendo la colaboración de la ONG ambientalista.
"Ahora vienen las elecciones y hemos visto venir a nuestra Isla a personas que no venían hace 30 años y vienen ahora, y cuando fue el tema de las salmoneras, de la contaminación, de la marea roja, no fueron capaces de sentarse a conversar con nosotros y prestarnos su ayuda, por eso les pido que no caigan y unirnos nuevamente y pedir que nos compensen", recalcó la dirigente.
Bandera
Por su parte, Ana Caileo, del Consejo de Comunidades Williche de Ancud, fue mucho más enfática en reclamar, recordando que el mar es parte de la espiritualidad de los pueblos originarios del Archipiélago y advirtiendo que "aquí yo nací, aquí me crecí, aquí yo di vida, aquí crecí a mis hijos, aquí quiero ver crecer a mis nietos y ver a mi familia, porque somos todos una machulla y que se dejen de burlar esas autoridades que nos han convertido en un basurero".
La dirigente reclamó que "no somos parte de Chile hermanos, no tenemos que levantar esa bandera chilena de la que se sienten orgullosos, porque Chile no nos ha considerado, aquí nosotros somos chilotes huilliche y esa es la bandera que desde ahora en adelante tenemos que llevar".
Otro que se pronunció sobre el informe de Greenpeace fue el diputado Alejandro Santana (RN), quien manifestó que "el gobierno no tiene margen para más ambigüedad y más incertidumbre. Según la ONG el vertimiento de salmones sirvió de fertilizante, lo que agudizó la presencia de marea roja", apuntando a la diferencia de resultados con la comisión de expertos científicos, a quienes se les encargó el estudio del fenómeno que azotó las costas de Chiloé en mayo.
Agregó el legislador que pedirá un pronunciamiento de la FAO, acerca de la acuicultura en Los Lagos.
"No le interesó que algunos de nosotros pudiéramos haber muerto".
Teresa Calfunao,, presidenta de la Agrupación, de Orilleras de Duhatao."
"No tenemos que levantar esa bandera chilena de la que se sienten orgullosos".
Ana Caileo,, dirigente huilliche."
FAO
"Hoy día Greenpeace plantea algo diferente y espero que en la próximas horas tengamos un pronunciamiento de la FAO, organismo de las Naciones Unidas para poder avanzar y generar un estado que nos permita definir claramente cual es la situación de la acuicultura en la Décima Región y cuáles son los planes de contingencia hacia delante", sentenció Alejandro Santana, indicando que se reunió con los máximos representantes de la FAO en Chile y logró aprobar en la Cámara de Diputados un proyecto de acuerdo para que el Ejecutivo pida al organismo internacional realizar los estudios en la zona afectada por la marea roja.
15 días se virtieron salmones descompuestos en las costas de Chiloé.