Nelson Soto Asencio.
Los locatarios de la Feria y del Mercado Municipal de Ancud no daban crédito ayer a lo que se está viviendo producto del cierre de amplias zonas de la comuna por el veneno paralizante de los mariscos (VPM) provocado por la marea roja. Ello abarca no solamente la costa pacífica, sino que el canal de Chacao, sectores del mar interior e incluso ríos como Quilo, Pudeto y Quempillén.
Si en Semana Santa las ventas fueron a la baja, aunque no había prohibición de extracción en Ancud, ahora simplemente los comerciantes de ambos recintos de calle Prat no tienen productos para el público, luego que la Autoridad Sanitaria prohibiera la recolección de mariscos bivalvos y también locos y picorocos.
Carlos Paillaleve, vendedor de la Feria Municipal, comentó que por ahora no venderá productos como almejas o choros mientras no se levante la restricción.
"Nos vinieron a fiscalizar y nos informaron sobre este problema que es muy complicado y difícil, no solo para nosotros los que vendemos productos del mar, sino para la gente que extrae los productos. Es lamentable y muy triste, y ojalá el Señor tenga misericordia de esta ciudad, porque nunca jamás habíamos vivido este flagelo", reconoció.
Sumó el pequeño comerciante que aumenta la preocupación en la comunidad local porque a la cesantía se suma la marea roja. "El desempleo en la ciudad será aún mayor, ya se vio con el tema de las salmoneras y ahora nos toca también a nosotros. Quiero comunicarle a la ciudad que esté tranquila porque hemos estimados nosotros ya no vender mariscos hasta que no se pueda certificar correctamente", recalcó.
Ultimando
Por su parte, en el mismo lugar Nofador Díaz se aprestaba ayer a vender los últimos kilos de choros. "Cada día se ganan el sustento diario a través del mar los pescadores y esto es una cadena, ellos trabajan y nos traen sus mariscos para vender en la feria. Estamos preocupados no solo por nosotros, sino por todo lo que está ocurriendo en Ancud", acotó.
A su vez, en el Mercado Municipal penaban las almas y solamente había rostros de tristeza y preocupación de los locatarios. "No sabemos qué es lo que está pasando, no sabemos de dónde salió esa marea roja. Es algo muy gravísimo para nuestra comuna y de que tengo juicio nosotros nunca hemos tenido marea roja. Esto es muy grave, sobre todo para la gente que vive del mar", lamentó Néstor Cárdenas.
Inquietud entre los comerciantes
Carlos Paillaleve, emprendedor de la feria
"Los golpes no enseñan a dar otro paso y ver las cosas de otra manera. En este sector todavía hay algunos mariscos y los muchachos lo tienen certificado y todo el marisco que entre lo tendremos que certificar. De todas maneras yo opté por no vender mariscos", reconoció.
Néstor Cárdenas, vendedor del mercado
"Es grave para los buzos que sacan mariscos en la bahía y en la caleta Pudeto. A todos nosotros nos cortan los brazos y a toda la comunidad le va mal como al colectivero, el comerciante, los taxistas. Aquí en Ancud se mueve todo por el marisco", expuso.
Nofador Díaz, pescadero de la Feria Municipal
"La gente está con miedo a esta toxina porque la verdad es muy fuerte y peligrosa. En este momento estamos vendiendo puros pescados porque no hay ningún peligro y decirles a los ancuditanos que siempre nos prefieren que el pescado no está contaminado", exhortó.
"No sabemos qué es lo que está pasando, no sabemos de dónde salió esa marea roja".
Néstor Cárdenas,, locatario del Mercado, Municipal de Ancud.