Testimonio y prueba científica, las claves en caso de violación
En la balanza se ponen estos aspectos dentro de los albores de la investigación de una denuncia en Quellón. Una mujer acusa haber sido ultrajada por dos sujetos en medio de una ingesta alcohólica.
Desde su génesis, las investigaciones por delitos sexuales se sumen en la disyuntiva de la acreditación de la prueba para configurar el delito. Esa es la clave dentro de estos casos, más si se tratan de violaciones los denuncios expuestos a los intervinientes del sistema procesal. Y dentro de esta esfera, la ponderación de los testimonios y la evidencia pericial constituye el punto excluyente para establecer los hechos.
Así se ha visto en juicios orales, como en los inicios de las indagatorias por estos fenómenos delictivos que golpean con fuerza la provincia. En la declaración y prueba científica está la llave para conducir una investigación, como también para llegar a una condena o lograr una absolución.
Está dinámica queda bien reflejada en el último caso de connotación que tiene como epicentro Quellón. Pese ser formalizados dos sujetos por el ultraje a una mujer de 45 años, los antecedentes acusatorios expuestos fueron considerados insuficientes por el sentenciador para acreditar la violación en estas instancias de la causa. Una serie de vaivenes que seguirán observándose con el avance de las diligencias.
Hechos
En lo relativo a este último caso, enmarcado en un contexto de alcohol se investiga lo que sería una aberrante agresión sexual contra una vecina en pleno centro de Quellón. Lo que sería una invitación a un "carrete" habría terminado en una desviación etílica, una víctima semidesnuda acusando un ultraje y dos detenidos.
Solo gracias a la intervención del hijo de la vecina quedó al descubierto el caso. El joven, al no tener noticias de su madre de 45 años, salió en su búsqueda. Cuando la desesperación se apoderaba de él, los antecedentes emanados por un testigo le advirtieron al isleño que su familiar se encontraba al interior de una vivienda emplazada en calle Capitán Alcázar.
Así fue confirmado por el mayor Darwin Illanes, titular de la Sexta Comisaría de Carabineros local, quien ratificó que "la mujer muchas veces se ha visto en situación de calle, por eso su hijo se preocupó y la buscó intensamente hasta que le dijeron que se encontraba en un domicilio, donde la halló semidesnuda".
Después del golpe de la impresión, el chilote intentó reunir mayores datos de lo sucedido con su progenitora, quien con las claras evidencias del consumo desmedido de licor le dio cuenta que habría sido agredida sexualmente.
Bajo este escenario, el mismo joven notificó la información recibida a la policía uniformada, que diseñó un amplio dispositivo para dar con el paradero de los presuntos responsables del ataque.
Como especificó el oficial, "una patrulla se constituyó en la casa que está emplazada a pocas cuadras de la unidad y se encontró a dos personas que habrían sido identificadas por la mujer como los responsables del ilícito".
Los sujetos aprehendidos fueron individualizados con las iniciales J.V.V. (48), quien es el dueño de la vivienda donde se realizó el encuentro etílico, y E.E.S. (39), quienes fueron puestos a disposición de la justicia.
En tanto, la víctima fue remitida al Hospital de Quellón, donde fue sometida a los exámenes sexológicos correspondientes para determinar la existencia de lesiones atribuibles a un ultraje.
Justamente, la necesidad de contar con este y otros informes periciales influyeron en la solicitud del fiscal de Quellón, Rodrigo Valladares, de ampliar la detención de los imputados por 24 horas, antes de proceder a formalizar una investigación en su contra.
El persecutor especificó que se logró la autorización para tomar muestras biológicas a los sujetos involucrados en este caso, quienes accedieron a someterse a estas pruebas. Además, se logró una autorización judicial para incautar prendas de vestir y otros elementos desde la vivienda donde se habría producido este delito.
Ya con mayores datos, el abogado procedió durante la mañana de ayer a encausar a los sujetos por el delito de violación. Eso sí, encontró la objeción judicial al analizarse la delgada línea de la calidad de la evidencia.
"Se tomó la declaración de la afectada y se realizaron los exámenes, pero el tribunal estimó que los antecedentes obtenidos desde el Hospital de Quellón, donde fue atendida la mujer, no serían concluyentes", apuntó el persecutor.
A pesar de esta oposición, la indagatoria formalizada no sufre contratiempos por la figura que propuso el fiscal, aunque sí varió la gravosidad de las cautelares que se impusieron, en especial debido a la postura que sustentó la defensa de los imputados.
De acuerdo a lo señalado por el defensor Nelson Troncoso, se acogieron los argumentos entregados durante la audiencia de este jueves. "No está acreditada la violación, el informe sexológico realizado no arroja lesiones atribuibles a una violación, tampoco se detectaron huellas de fluidos biológicos en la víctima", acotó.
Bajo este contexto, entra la balanza la fuerza de la prueba y del testimonio de la afectada. Y este último punto también fue cuestionado por el jurista. "La mujer presenta un daño emergente cerebral y da cuenta que no se acordaba mucho de la situación que vivió, más por su condición etílica", enfatizó.
Analizando todos estos elementos, el tribunal determinó que los imputados quedaran con arresto domiciliario nocturno, firma semanal ante la autoridad, arraigo nacional y prohibición de acercarse a la víctima. Sin embargo, el fiscal Valladares apeló verbalmente con el objeto que se imponga la prisión preventiva.
El representante del organismo persecutor fundamentó esta instancia en la gravosidad asignada al delito, el peligro que constituyen los imputados para la seguridad de la víctima y por los antecedentes reunidos que serían suficientes para establecer indicios de participación en los sujetos que quedan en calidad de detenidos a la espera de la resolución de la Corte de Apelaciones de Puerto Montt.
Valoración
Más allá de la cautelar que se decrete en definitiva en el inicio de los 90 días asignados para desarrollar la indagatoria, se aguarda por las primeras pericias formalizadas para dar sustento a una futura acusación, dentro de la cual muestra su importancia el valor de los testimonios, como las conclusiones de las pesquisas científicas.
Por un lado, está la declaración de la víctima, como también de un eventual testigo que habría escuchado gritos de auxilio desde el interior del domicilio donde fue encontrada la mujer de 45 años. No obstante, como explicó el defensor Nelson Troncoso, esta información "no ha sido refrendada", ante posibles represalias.
Asimismo, como indicó el mismo profesional, en veremos estaría la declaración del hijo de la víctima, puesto que no ha entregado su versión de manera detallada.
En tanto, los detenidos que esperan en la cárcel de Castro la decisión del tribunal de alzada sobre su cautelar desconocieron su autoría en los hechos.
Considerando todos estos puntos, cobran importancia los datos que se obtengan de los intervinientes como testigos, lo que se analizaría con los resultados de las pericias médico-forenses. Y en este cúmulo de información que se obtenga se podrá verificar la existencia de lo que asoma como un aberrante delito marcado por el consumo desmedido de alcohol.
"La mujer muchas veces se ha visto en situación de calle, por eso su hijo se preocupó y la buscó".
Darwin Illanes,, jefe de la Sexta Comisaría de Carabineros de Quellón
Pericias
Las primeras diligencias fueron instruidas para personal de la SIP de Carabineros y la Avanzada de la Policía de Investigaciones local. Germán Cea, jefe subrogante de la Bicrim de Castro, ratificó el despliegue en el sur de la Isla, añadiendo que se está en espera de nuevas diligencias. Inicialmente, como se informó desde el Ministerio Público, se ordenó el levantamiento de evidencia desde el sitio del suceso, como prendas de vestir que pertenecerían a los imputados. Además, se espera analizar los datos que entreguen testigos.
45 años tiene la afectada que fue sometida a los exámenes sexológicos correspondientes.