El actual gobierno pretende generar las condiciones para un gran relleno sanitario provincial que de nada sirve si este no ofrece una planta destinada a reciclar la basura, permitiendo la producción de combustible y también abono para la actividad agrícola. En Chile aún seguimos con vertederos y nos pretenden hacer creer que la solución pasa por un relleno sanitario. En Europa, que he tenido la posibilidad de conocer sus experiencias, los rellenos sanitarios están en retirada, dando paso a grandes plantas de reciclaje donde la basura tiene un nuevo uso, transformándose en motor de desarrollo y no de contaminación.
La basura que va a vertederos tiene un costo adicional en transporte y un efecto de contaminación en grandes espacios de terrenos.
En países avanzados estos residuos son utilizados para generar energía eléctrica reduciendo lo que no sirve a un 15%. En nuestra provincia debemos ser capaces de generar condiciones para el tratamiento de la basura, sea este provincial o en alianza entre municipios limítrofes, generando espacios consensuados con la comunidad.
La tecnología más barata es el relleno sanitario como método de disposición final y lo que se requiere en realidad son plantas de reciclaje para reutilizar la basura, así no se desaprovecha el valor energético de los residuos, estos pueden aportar energía eléctrica o calorífica para lugares fríos como nuestra comuna y provincia. La solución pasa por una participación real y efectiva, escuchando a la comunidad y no imponiendo soluciones fáciles que a la larga terminan trayendo dolores de cabeza.
Columna
Juan Eduardo Vera,, concejal de Castro