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A partir de hoy domingo 3 de enero comienza a funcionar en su nuevo espacio la tradicional Feria de las Pulgas de Dalcahue.

El grupo de locatarios que ha comercializado tradicionalmente en el sector de la costanera prestará sus servicios en el acceso principal al Liceo Polivalente y la Escuela Dalcahue que conectan con la calle Mocopulli.

La decisión para reubicar a los comerciantes fue acordada en el concejo considerando lo que será la futura intervención del borde costero de la ciudad, cuyas obras han sido planificadas para que se inicien a contar de marzo próximo.

El área de funcionamiento corresponde a los ingresos a ambos establecimientos educacionales, lo que fue aprobado igualmente por la Corporación Municipal de Educación y Servicios Ramón Freire.

Juan Hijerra, concejal de la UDI, sentenció que la decisión del Concejo Municipal de Dalcahue se sustenta a partir de la necesidad de apostar por un desarrollo local tomando en cuenta la gran transformación que se realizará en el borde costero, para lo cual se invertirán más de 2.200 millones de pesos.

Recordó que "por años la feria funcionó en el área de la costanera de Dalcahue, pero en honor a la verdad y escuchando a los vecinos ellos todos los domingos se veían afectados".

Hijerra enfatizó que el área de emplazamiento para la feria dominical "es un lugar apto, creemos nosotros en opinión técnica, y además no molesta a ningún vecino y permite un mayor control porque es un recinto cerrado".

El político recordó que estos pequeños comerciantes se rigen por un reglamento de funcionamiento que en teoría comprende entre las 8 y 14 horas, el cual no se estaría cumpliendo totalmente.

"A los feriantes que no respeten este horario no se les va a renovar el permiso para el mes siguiente, porque creemos que en la medida que esté más ordenado va a poder ser más eficiente y se va a ver mejor para la gente que vive en Dalcahue y para el visitante", consignó el edil.

Según los cálculos realizados por la Dirección de Obras Municipales de Dalcahue, en este espacio público podrán comercializar 141 puestos. J

"Nosotros estábamos en la calle; mientras tanto, estuvimos bien complicados porque ya no nos daban más los brazos y ahora quedamos con una techumbre; ahora, lo que nos falta es el agua en nuestros puestos", manifestó la pequeña comerciante.

"El asunto es que seguimos con el sol por el techo (tragaluz), ya que nos protege del agua, nosotros estuvimos más de un mes en la calle aquí en Pedro Montt vendiendo nuestros productos", enfatizó la vendedora de productos hortícolas.

"Ahora hay que ir preparando todo lo que es el segundo piso con cerámicas, muros, se está trabajando en eso, se termina eso, y ya viene otra empresa a trabajar lo que es la separación de los restoranes, la instalación de las cocinas", mencionó.