Camila Infanta S.
Libertad Escobar Díaz, funcionaria del hogar de ancianos Años Dorados de Maipú, reconoció ayer que amarró y amenazó a la residente María Tapia, pero justificó el hecho en que estaba agresiva y podía golpear a otros adultos mayores.
La mujer fue formalizada ayer, junto a la también residente Angélica Farías (69), por amenazas. El tribunal de garantía determinó un plazo de 60 días para investigar lo sucedido, la prohibición de acercarse a la víctima, arraigo nacional y firma mensual.
El caso estalló el domingo cuando un vecino divulgó la filmación en que se ve a Escobar y Farías amarrando a Tapia con una sábana a un poste del patio del hogar. En el registro se ve cuando le dicen que si sigue pidiendo auxilio la van a ahorcar. La mujer pedía auxilio y aseguraba que le habían pegado.
"Le tomé por la espalda porque estaba agresiva", dijo Escobar tras la formalización. Las mujeres tienen cargos por el delito de amenaza y no por agresión, pues tendrá que ser el Servicio Médico Legal el que ahora entregará un informe que constate las lesiones que sufrió la anciana, lo que podría desencadenar una nueva formalización, que se realizaría el 4 de noviembre.
Ayer, además se informó que la mujer agredida de 88 años fue retirada del hogar de ancianos, donde viven otras doce personas y del que no se habían informado de agresiones previas. Ella quedó al cuidado de una sobrina.
Certificaciones
La jefa del Departamento de Profesiones Médicas de la Seremi de Salud Metropolitana, Luisa González, informó que el mismo domingo se realizó una fiscalización al hogar de ancianos en Maipú, hallando deficiencias en la mantención del establecimiento, aunque más bien de infraestructura
En conversación con Radio Cooperativa, la funcionaria contó que el lugar se había fiscalizado anualmente siete veces antes y en 2012 se había abierto un sumario sanitario por la condición de salud de los residentes e infraestructura.
Al respecto, la ministra de Salud, Carmen Castillo, llamó a que las familias que necesiten o deseen instalar a sus seres queridos en uno de estos centros exijan las certificaciones de todos los entes responsables.
Este centro, en Maipú, tenía la certificación de la Seremi de Salud, pero no el permiso municipal. J
La directora del Servicio Nacional del Adulto Mayor (Senama), Rayén Inglés, aseguró que por este tipo de situaciones es que es tan importante que las atribuciones del servicio permitan realizar una fiscalización en un modelo sociosanitario, en que se analice no solo las condiciones en las que viven los ancianos, sino también en el trato que reciben.
Inglés dijo a CNN Chile que lo más preocupante es que esto ocurre puertas adentro y se debe informar.