Acreditan salvaje asalto por 4 "lucas" para beber
Pedro Bárcena González
Un asalto con amplias consecuencias perpetraron dos jóvenes en calle Luis Espinosa de Castro. No solo se acreditó la responsabilidad de ambos en el ilícito y recibieron una pena de crimen, sino también que se determinó debido a su accionar el reforzamiento de la vigilancia de la zona. Incluso, en el sitio del suceso ahora existe una plaza segura.
En dicho lugar, un trabajador sufrió una brutal golpiza -sufrió una contusión zigomática izquierda y erosiones en muñeca y brazo-, motivada por el alcohol y apenas 4 mil pesos que portaba. Dos sujetos lo abordaron y utilizando un cuchillo lo amenazaron a plena luz del día, apoderándose también de su teléfono celular.
El atraco se produjo en noviembre del 2013 y después de prolongadas diligencias que incluyeron hasta una reconstitución de escena, se logró llegar a un juicio en que se determinó la responsabilidad de los chilotes de iniciales O.P.C.C. (27) y J. E.N.N. (39) en el delito de robo con violencia e intimidación.
En el Tribunal Oral en lo Penal de capital chilota se realizó la audiencia en la cual la sala presidida por el magistrado Claudio Ayala condenó a los amigos a 5 años y un día de presidio efectivo.
modificatorias
El fiscal Javier Calisto solicitó 10 años y un día de reclusión, pero al no acogerse la agravante de pluralidad de malhechores la cuantía de la sentencia fue menor. Eso sí, el persecutor se mostró conforme al acreditarse la figura legal invocada y desecharse la tesis de recalificación por hurto y lesiones que postulaba la defensa.
El abogado del Ministerio Público indicó que clave para esta determinación fue el aporte de dos funcionarios policiales de civil que intervinieron en el acto. "Concurrieron en seguida al escuchar los gritos de la víctima, por lo cual presenciaron el ilícito", afirmó, sumando que la prueba también contó con otros testigos, la declaración del afectado y la evidencia material: el cuchillo empleado en el ataque, de 11 centímetros de empuñadura y 8 de hoja.
Por su parte, el defensor Filippo Corvalán, quien representó al menor de los acusados, resaltó que el móvil del incidente se basó "en una discusión por el pago de una cerveza". Igualmente, aseveró que "no existían antecedentes de la sustracción de especies".
Bajo este contexto, el profesional pidió la recalificación, al igual que su colega Víctor Carreño, quien representó al carpintero. Sin embargo, esta postura no fue acogida, como tampoco la atenuante de colaboración sustancial en la causa.
Eso sí, como apuntó el defensor, "la pena fue establecida en el mínimo legal", correspondiendo a la mitad de lo inicialmente invocado por el organismo persecutor.
Asimismo, los defensores solicitaron el abono del tiempo en que estuvieron los jóvenes privados de libertad. J
Debido a este atraco, como a las numerosas llamadas de emergencias y denuncias por ilícitos en el pasaje Luis Espinosa, los vecinos se organizaron y solicitaron diversos encuentros con Carabineros.
No solo se reforzó de forma aleatoria la vigilancia policial por el lugar, sino también se postuló un proyecto para transformar el punto donde se produjo el asalto en una plaza segura.
Tal como indicó el presidente de entonces de la Junta de Vecinos Miramar, José Cárdenas, ante la presencia "de numerosas personas que beben alcohol a toda hora y los delitos de robos que se estaban cometiendo, pedimos reforzar la seguridad. Una solicitud que periódicamente estamos haciendo porque la sensación de intranquilidad continúa", aclaró.