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Preocupados por el foco de delincuencia que se presenta diariamente a pocos metros de sus viviendas se encuentran vecinos del populoso sector de Altos de Caracoles, en la ciudad de Ancud, lugar donde en el último tiempo se vive con cierta frecuencia algunas situaciones conflictivas.

Dicha zona alberga a poco más de 2.500 habitantes, agrupados en aproximadamente 500 familias que están distribuidas en distintas poblaciones, entre las que se encuentran San Juan de Dios, San Esteban y las villas Punotro, Los Lagos y Las Artes, sin olvidar a la población Altos de Caracoles que lleva el mismo nombre de este barrio en expansión.

En este contexto, dirigentes sociales reiteraron, casi en forma unánime, el reclamo por la falta de vigilancia policial, aseverando que se hace necesaria por el crecimiento demográfico del lugar la instalación de una unidad de Carabineros.

Carolina Delgado, secretaria de la Junta de Vecinos de Villa Las Artes, reconoce haber sido víctima de ciertos hechos delictuales hace poco tiempo atrás.

"Me quebraron un vidrio, yo estando adentro de la casa, sentí la risa de los chicos, salí, me asomé a la ventana y ellos me vieron que yo los vi; llamé a Carabineros y ellos me decían que sabían de quienes se trataba, y eran todos menores de edad, no les vi la cara pero sí las vestimentas; los carabineros salieron a buscarlos y no encontraron a nadie; testigos no habían tampoco, así que hasta ahí nomás quedó el asunto", reclama.

Otra de las denuncias vertidas por la dirigenta es "nos hemos visto afectados por el quiebre de vidrios de nuestros vehículos que quedan afuera; la población es chica, no todas las casas tienen entrada de vehículos y nos vemos obligados a dejarlos afuera y ellos son los que sufren los destrozos".

Frente a ello, la pobladora hizo un ferviente llamado a Carabineros a aumentar la vigilancia en este lugar. "Nos gustaría que llegue más vigilancia policial, rondas en las noches; después de nosotros ya hay sitios eriazos, muchos muchachos bajan a tomar, a drogarse; entonces, después en amanecida es cuando vienen los problemas", esgrime.

El relato de esta pobladora se une al de otro residente de la misma villa, Víctor Huentelicán, quien sostiene que la falta de presencia policial se hace notar, más aún considerando que en el sector céntrico de la urbe esto es diametralmente distinto.

"En el centro tú puedes ver todas las noches de a dos o de a tres furgones de Carabineros, las 'cucas', como se les dice, que se estacionan en la plaza, pero aquí -un lugar medianamente periférico- no pasa eso, con suerte vienen una o dos veces en el día, pero en la noche es cuando queda la embarrada", menciona.

Suma Huentelicán que "a mí me robaron mi galón de gas, con lo caro que sale todo ahora, es triste vivir con esa inseguridad, eso sin contar las peleas y cosas que se escuchan, sobre todo los fines de semana; aparte este sector está lleno de sitios eriazos, eso aumenta la delincuencia; pareciera que estos chicos saben cuando uno no está en su casa porque ahí es cuando roban".

Bajo este contexto el poder contar con un retén de Carabineros en el sector, que atienda los requerimientos de una población que en los últimos años ha crecido considerablemente, es una de las principales demandas que han expresado las organizaciones ciudadanas de estos nuevos conjuntos habitacionales.

John Hurtado, presidente de la Junta de Vecinos de Altos de Caracoles, afirma que la presencia estable de uniformados en la zona debiese permitirles vivir más tranquilos.

"Todo el sector de Altos de Caracoles, las juntas de vecinos, los comités de adelanto, queremos que se coloque ya definitivamente, porque la población ha crecido cualquier cantidad; lo que nosotros sugerimos es que hoy día ya se pueda instalar un retén de Carabineros, eso creo que es el anhelo, el sueño de todos los pobladores, porque nosotros queremos vivir tranquilos, queremos vivir dignamente, no queremos seguir aguantando los desórdenes".

Asimismo, el dirigente subraya que "el sector de Altos de Caracoles hace un tiempo que está más tranquilo, eso no significa que la delincuencia o los malos ratos que han pasado los vecinos hayan terminado".

Por su parte, María Güineo, también vecina del lugar, coincide con Hurtado, aseverando que "me tocó en el verano salir con mi familia unos días, y volvimos y también tuvimos vidrios quebrados en todo el frente de la casa, por eso creo que es importante que Carabineros se establezca físicamente en este lugar, sería todo más fácil y seguro para nosotros los pobladores".

En tanto, Laura Asenjo, quien es tesorera del Comité de Bienestar de Altos de Caracoles, declara que en los últimos meses se ha visto una disminución en hechos de connotación vandálica, aunque el llamado a Carabineros es a seguir resguardando esta zona.

"Este momento está mejor, hace un tiempo era imposible andar por las noches, no se podía ni salir, cualquier día se veían cosas extrañas; ya se veía que andaban con los machetes, con todo acá arriba", recuerda.

carabineros

Desde la policía uniformada, el mayor de la Primera Comisaría de Ancud, Miguel Gatica, señala que si bien es cierto este sector de la ciudad se ha caracterizado por ser protagonista de algunos conflictos en materia de delincuencia, en cuanto a cifras no concentra un porcentaje alto de delitos.

"Nosotros realizamos siempre reuniones con las organizaciones sociales, mantenemos nuestra presencia y como digo no es un sector que tenga una gran concentración de delitos, sí se producen hechos pero no se concentran básicamente en ese sector", consigna el oficial.

Del mismo modo, el comisario reitera que su institución continúa realizando rondas extraordinarias en Altos de Caracoles con el propósito de evitar la ocurrencia de ilícitos y resguardar la seguridad de los pobladores. "Nosotros mantenemos una presencia constante, nosotros focalizamos nuestros servicios de acuerdo a la estadística, de acuerdo a las denuncias que mantenemos en cada sector de la comuna y si hay mayor requerimiento, (los vecinos) tienen que representar la situación", sentencia.

A su vez, Alejandro Albán, capitán de la unidad policial, expone que las cifras de denuncias provenientes desde Altos de Caracoles son menores a un 10% dentro del total de la comuna.

"La instalación de un retén en cualquier área operacional se sustenta en base a un estudio, y ese estudio primero es en base a cifras, para que justifique la presencia de un retén; debe existir un antecedente cuantificable para poder establecerlo, relativo a que haya un aumento considerable de delitos, robos, un sensación de inseguridad, estar en un aumento constante", arguye.

Añade el uniformado que frente a "la situación de Altos de Caracoles, como en todas estas poblaciones nuevas que están establecidas, nosotros no tenemos registros sustanciosos de un aumento delictual que pudiese justificar para que nuestra Dirección de Planificación (y Desarrollo de Carabineros) levantara datos para la instalación de un retén".

UNIÓN COMUNAL

En una mirada más global de lo que ocurre en Ancud, Adriana Gallardo, presidenta de la Unión Comunal de Juntas de Vecinos Urbanas, sostiene que la seguridad ciudadana es responsabilidad de toda la comunidad. Es por ello que la "colaboración responsable y organizada es un pilar fundamental para combatir la delincuencia".

"Estamos trabajando incansablemente por el tema de la seguridad en Ancud, lamentablemente entró la inseguridad acá con todos los hechos delictivos que están pasando últimamente, incluso con lo que pasó hace poco en el Parque Bellavista; estamos apuntando a que la seguridad se manifieste más dentro de nuestra comuna", califica.

La líder social concluye que "estamos tratando de hacer una mesa de seguridad ciudadana, pero lamentablemente siempre que solicitamos que nuestras autoridades estén, no pueden, porque no tienen tiempo, porque la agenda está llena", junto con rematar que "para la primera semana de mayo tenemos que preparar nuestra mesa de seguridad, donde vamos a invitar a Carabineros, a la PDI, y ahora se nos va a incorporar la Fiscalía; estamos preocupados por todos los sectores de Ancud". J