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Diversas diligencias indagatorias realiza la Bicrim para aclarar un millonario robo que afectó la propiedad particular de un concejal en la ciudad de Ancud.
El ilícito se produjo durante la mañana de este viernes en la vivienda del edil quemchino Rigoberto Barrientos, ubicada en calle Esmeralda de la urbe del río Pudeto.
La falta de medidas de seguridad y la ausencia de moradores fueron determinantes para que los desconocidos ingresaran por una puerta posterior que la dueña había dejado abierta. Una vez en su interior se dirigieron a uno de los dormitorios para sustraer joyas avaluadas en una suma de 2 millones de pesos.
Alex Laubscher, comisario y jefe de la PDI en Ancud, explicó que en la acción los delincuentes no provocaron ningún daño a los accesos al inmueble, enfatizando que "en la puerta quedó una llave atrás, que fue propicio para que los delincuentes ingresaran al inmueble".
Una vez efectuada la denuncia, se hizo presente un equipo de la policía civil que realizó pericias para permitir aclarar la comisión del delito y dar con el paradero de los autores del robo.
"Se aplicaron químicos al inmueble, superficies aptas para encontrar huellas, se fijó fotográficamente y se empadronó el lugar sin resultados hasta el minuto", manifestó el comisario.
VULNERADO
El concejal Barrientos señaló que esta sustracción dejó al descubierto una serie de deficiencias en materia de protección.
El político del PPD, quien aún calculaba la pérdida de sus especies, expresó que "estamos vulnerados, le explicaba que tenemos un perro policial, que en seis años habíamos dejado la casa sola y nunca había pasado nada".
Detalló que los objetos robados son de "un tremendo valor sentimental para su familia" y que difícilmente podrá recuperar.
FISCALía
Desde el Ministerio Público, el fiscal (s) de turno, Fernando Metzner, instruyó diversas diligencias, las que se efectuarán dentro de un plazo de 10 días. Mientras tanto, el edil junto a su familia reforzarán las medidas de seguridad para evitar que antisociales ingresen de nuevo y atenten contra la seguridad de los residentes de la morada. J