Apostando a su experiencia, conocimiento de la realidad chilota y su trayectoria política, Sergio Schick Cifuentes, de 53 años, profesor, casado, padre de tres hijos y procedente de la ciudad de Santiago, coloca sus fichas para que este 17 de noviembre pueda ser electo consejero regional.

El político perteneciente a las filas de la Unión Demócrata Independiente, UDI, en 1983 se radicó en la provincia de Chiloé, específicamente en la ciudad de Castro, donde vivió hasta 1995, para luego trasladarse a Ancud, lugar donde ha permanecido hasta el día de hoy.

El docente trabajó en la Municipalidad de Ancud como director de Desarrollo Comunitario con los alcaldes Domingo Cárdenas y Kurt Haarmann, y fue jefe de Secplan, lo que le permitió adquirir conocimientos en el área de los proyectos y materias presupuestarias.

CONCEJAL

CONCEJAL

Después, Schick resultó electo concejal de Ancud por dos períodos con la más alta mayoría en la Alianza. El político tuvo que retirase por un tiempo debido a un problema de salud, pero asegura que ya está de vuelta.

Dice que gran parte de su vida la ha dedicado a trabajar y establecer nexos familiares en Chiloé y cumplir funciones en varias comunas de la Isla. "Soy un agradecido de lo que me ha dado esta provincia, porque todo lo que soy desde el punto de vista personal y familiar, todo se lo debo a Chiloé", explica.

-A mí me tocó participar en política cuando se estaba finiquitando el período militar, en ese tiempo yo era profesor en Liceo Politécnico de Castro y en el Instituto del Mar de Chonchi, muchos vecinos me pidieron en esa época que me haga cargo de la campaña presidencial, que fue la primera de Hernán Büchi.

Me tocó ser el jefe territorial en toda la provincia de Chiloé y Palena, fue una experiencia inolvidable porque era una época difícil, ya que había terminado el régimen militar y había que volver a la democracia. Fue una de las elecciones más difíciles que me tocó vivir, porque en ese tiempo no se consideraba a uno adversario político sino que enemigo político. Una época negra que espero nunca más vuelva pasar en nuestro país, porque los que estamos en política lo hacemos por un tema de servicio público, porque todos queremos lo mejor por nuestro país.

-Se presentó esta instancia de ser consejero porque es como la continuidad que uno pueda ser como servidor público. Los consejeros vamos a tener una tarea de cercanía con la población y las organizaciones y eso va a ser un hecho práctico. La comunidad todavía evalúa lo que hace un consejero porque no lo tiene claro, sin embargo, con el transcurrir de los años esperamos que los que sean electos, espero ser yo uno de ellos, podamos hacer este trabajo para que la gente conozca lo que se hace. Definir y priorizar cuáles son los presupuestos para la concreción de algunos proyectos de las distintas comunas de Chiloé, va a ser una tarea hermosa.

-Fundamentalmente porque conozco la realidad de Chiloé y en esto quiero ser súper categórico, en este período electoral que se está terminando, no creo que sean más de dos o tres los candidatos a consejero que hemos logrado recorrer toda la provincia. Esto ha sido porque hemos establecido nexos con mucha gente en los distintos lugares. Tengo claridad de los problemas en la salud, educación, pueblo huilliche, medio ambiente y de los pescadores artesanales en Quellón, Castro, Chonchi, Ancud y eso me va a permitir desarrollar bien mi labor como consejero regional.

El 17 de noviembre, además de presidente, senador y diputados, los chilotes deberán elegir a los consejeros regionales.

El ex concejal tuvo que conformar su partido, la UDI, que no existía en Chiloé con un grupo de no más de cinco a seis personas. Fue el fundador de este conglomerado político, que ha crecido durante los últimos años.

"Mi vida ha estado ligada al servicio público y cuando uno puede solucionarle un problema a un grupo familiar, a emprendedores o a la gente que requiere de los servicios de alguien que sea una autoridad política y uno se lo puede brindar, es muy satisfactorio", señala el UDI.

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