Ricardo Mundaca Izquierdo

Hasta junio del 2013, muchos papás sufrían en carne propia la imposibilidad de acceder a la custodia compartida de sus hijos tras una separación como parejas. La razón obedecía al artículo 225 del Código Civil que dejaba automáticamente a la madre con el cuidado personal de los hijos en caso de separación de los progenitores.

La historia detrás de esta ley de la República, conocida con el título ciudadano de "Amor de Papá", es una saga que comienza hace algunos años tras las vicisitudes que debió pasar un profesional luchando por ver a su hijo. El sistema que regulaba el tiempo de los hijos con sus padres, tristemente conocido como 26/4 (26 días con la madre y cuatro con el padre), y que imperaba en ese entonces, lo hizo luchar decididamente para formar una agrupación de papás e intentar lograr una mejor administración de justicia en el caso de la tuición de los hijos de parejas separadas.

Recientemente dos protagonistas de esta historia, David Abuhadba y su hijo Lucas, estuvieron el sur de Chiloé, invitados por la Oficina de la Mujer y Equidad de Género de la Municipalidad de Quellón, donde compartieron su experiencia y explicaron a los presentes en un conversatorio los alcances de la Ley Amor de Papá. Varios papás presentes contaron sus realidades, historias tristes por cierto.

Abuhadba, de 50 años, periodista de la Pontificia Universidad Católica de Chile, es director de Amor de Papá. Junto a Lucas, de 19 años y estudiante de periodismo, explica los alcances de esta norma, la N°20.680, a quienes necesitan orientación al respecto.

"Me decidí a crear la agrupación Amor de Papá en noviembre del 2007 para darle una vida sana y justa a mi hijo tras la separación con mi pareja. Me di cuenta que en los tribunales de menores de esa época en Santiago no se respetaban los derechos de los papás ni de los niños, y las juezas me indicaban que la ley, lamentablemente, en Chile favorecía a las mamás en el cuidado de los hijos", manifestó.

Esa fue la razón de esta iniciativa, más el enfrentarse a un discurso terrible por parte de su hijo. "Me decía 'mátate, suicídate, me arruinaste la vida, tú no eres mi papá'", recordó, lo que decidió al profesional a organizar un referente para ser capaz de impulsar un cambio de ley y que de ahí se fuera creando un cambio cultural.

Transcurridos unos pocos meses desde la creación de la agrupación, el 11 de junio del 2008, se logró ingresar el proyecto de ley "Amor de Papá", moción que fue respaldada por diez diputados de la República de distintos sectores políticos.

Abuhadba relató que "exactamente cinco años después, el 11 de junio del 2013, nuestra Ley Amor de Papá es aprobada el mismo día en ambas cámaras del parlamento. Por la mañana en la Cámara de Diputados y por la tarde se aprobó en el Senado. Cinco días después, coincidentemente un 16 de junio, domingo, Día del Padre en nuestro país, es promulgada la ley en el Palacio de la Moneda, en presencia del entonces Presidente Piñera y nuestra agrupación".

Destacó el periodista la participación en el proceso de la ahora ex senadora Soledad Alvear, a quien define como "la gran mamá de la Ley Amor de Papá", el senador de Renovación Nacional Francisco Chahuán y de la ministra del Sernam de la época, Loreto Seguel. Un aporte importantísimo le asigna Abuhadba a la jueza Gloria Negroni: "Fue una de las magistradas más importantes en la defensa de nuestra ley en toda su tramitación en el Congreso".

Modificaciones

La Ley N° 20.680, según su enunciado, lo que hizo fue "introducir modificaciones al Código Civil y a otros cuerpos legales, con el objeto de proteger la integridad del menor en caso que sus padres vivan separados".

De acuerdo a la información que entrega la agrupación Amor de Papá, dentro de sus alcances está la instauración en Chile de la figura de custodia compartida sobre la base de la corresponsabilidad parental. Esto significa igualdad de derechos y obligaciones para el padre y la madre en el cuidado de los hijos en caso que se separen.

Según la entidad, la nueva norma termina con la inconstitucionalidad del artículo 225 del Código Civil, que dejaba automáticamente a la madre con el cuidado personal de los hijos en caso de separación de los progenitores. Al respecto, indica que el artículo 19, número 2, de la Constitución del país establece la igualdad entre hombres y mujeres.

Esta ley, enfatizó la organización, acaba con la discriminación que han debido sufrir miles de papás y que permitía a progenitoras disfuncionales "adueñarse" del hijo para instrumentalizarlo como "moneda de cambio", como una suerte de desquite por una relación que no funcionó. Para Amor de Papá, la legislación favorece el acuerdo entre los padres al ponerlos en igualdad de condiciones para conseguir lo mejor para los hijos.

Testimonio

Alguien que tuvo un rol protagónico en la consecución de la Ley Amor de Papá es, sin duda, Lucas Abuhadba (19), hijo de David, quien según su relato vivió en carne propia el drama de la separación de sus progenitores. "La experiencia en Amor de Papá partió hace poco, pero la experiencia de vida que tengo viene desde los cuatro años, que fue cuando mis papás se separaron. En ese momento, con la ley que regía en Chile en ese entonces, yo quedé con mi mamá, teniendo un régimen de visitas con mi papá unas cuantas veces al mes", compartió.

Lucas prosigue: "Uno cuando es chico, regalón de la mamá, le hace caso en todo y es inocente; uno le creía las cosas a la mamá porque no quería estar mal con ella. Cuando me hablaba cosas malas de mi papá uno por lo general lo creía, yo lo creía cuando chico cosas atroces. Yo igual al final dudaba en un momento, pero decía es mi mamá y no quiero estar en mala con ella".

El joven sumó que a medida que pasaba el tiempo se fue dando cuenta que efectivamente lo que su madre le decía era falso en la mayoría de los casos. Apuntó que "mi mamá no solo me separó de mi papá, sino también de mi familia paterna y materna. A mis abuelos maternos, la única familia que tengo por el lado de ella, no me dejaba verlos por razones que yo jamás creí".

A raíz de todo esto Lucas comenzó a buscar la fórmula que le permitiera irse a vivir con su progenitor. Confesó que tuvo una época muy crítica que incluso lo llevó a atentar contra su vida. "Yo no quería seguir viviendo, aparte del estrés que me generaba estar en la casa de mi mamá. Por ese estrés, depresión y miles de cosas que me ahogaban, decidí a los 15 años irme a vivir con mi papá a la mala. Sin jueces de por medio, sin permiso de la mamá ni nada. Fue pescar mis cosas, con la excusa que me iba a la playa, echarlas a un bolso grande con todo lo del colegio y mis pertenencias", expresó.

Un par de semanas después del paso dado, el estudiante de periodismo relata que aparece en su casa una comunicación para una audiencia de entrega inmediata por parte de su madre, aduciendo que su padre poco menos lo había secuestrado, a pesar de la constancia que habían dejado en Carabineros.

Tras ello, el juez le pregunta a Lucas qué fue lo que pasó y él le respondió: "No quiero estar más con mi mamá, quiero estar con mi papá. Con mi mamá estoy 'chato' y quiero estar con mi papá para estar tranquilo".

Ese es parte de la realidad que experimentó este muchacho en medio del conflicto entre sus padres. Hoy ya vive definitivamente con su papá y a su madre la ha visto solamente en tribunales. La historia de Lucas y su progenitor seguramente no es la única, tampoco el tema es que esta lucha sea exclusivamente de los padres, también hay mamás en la misma situación. Lo rescatable es que exista una ley en Chile que iguala los derechos parentales sobre la tuición de los hijos de las parejas que se distancian y protege la integridad de los menores envueltos en estos casos.

"Me di cuenta que en los tribunales de menores de esa época en Santiago no se respetaban los derechos de los papás ni de los niños".

David Abuhadba,, fundador de Amor de Papá.

"Por ese estrés, depresión y miles de cosas que me ahogaban, decidí a los 15 años irme a vivir con mi papá a la mala. Sin jueces de por medio, sin permiso de la mamá ni nada".

Lucas Abuhadba,, hijo de David Abuhadba.